El nuncio apostólico Bruno Musaró encabezará el próximo martes por la noche en la Catedral de La Habana, en la Habana Vieja, una "misa de acción de gracias" por los ocho años del pontificado de Benedicto XVI, a la cual asistirán "altos dirigentes" del gobierno cubano, confirmaron a France Press (AFP) fuentes eclesiásticas.
"Va a ser una misa de acción de gracias por los ocho años del pontificado de Benedicto XVI, una ceremonia de despedida", que "seguramente estará presidida por el nuncio apostólico", pues "el cardenal cubano Jaime Ortega se encuentra fuera de la isla, dijo a la AFP una funcionaria de la Catedral.
Destacó que a la ceremonia religiosa, que se celebrará dos días antes de que Benedicto XVI abandone su pontificado, fueron invitados "altos dirigentes del Gobierno cubano" y podrá participar "todo el que quiera".
El papa alemán, de 85 años, anunció su renuncia el pasado 11 de febrero debido a su avanzada edad, en un gesto inédito en la historia reciente de la Iglesia que Ortega calificó ese mismo día como "una invaluable lección de humildad" y de "valentía".
Benedicto XVI visitó la isla del 26 al 28 de marzo de 2012, ocasión en que pidió al gobierno comunista respetar las "libertades fundamentales" y condenó el embargo que impuso Estados Unidos a Cuba hace medio siglo.
Las relaciones Iglesia-Estado fueron difíciles tras la llegada de Fidel Castro al poder en 1959, pero mejoraron considerablemente a partir de la visita del papa Juan Pablo II a la isla, en 1998.
"Va a ser una misa de acción de gracias por los ocho años del pontificado de Benedicto XVI, una ceremonia de despedida", que "seguramente estará presidida por el nuncio apostólico", pues "el cardenal cubano Jaime Ortega se encuentra fuera de la isla, dijo a la AFP una funcionaria de la Catedral.
Destacó que a la ceremonia religiosa, que se celebrará dos días antes de que Benedicto XVI abandone su pontificado, fueron invitados "altos dirigentes del Gobierno cubano" y podrá participar "todo el que quiera".
El papa alemán, de 85 años, anunció su renuncia el pasado 11 de febrero debido a su avanzada edad, en un gesto inédito en la historia reciente de la Iglesia que Ortega calificó ese mismo día como "una invaluable lección de humildad" y de "valentía".
Benedicto XVI visitó la isla del 26 al 28 de marzo de 2012, ocasión en que pidió al gobierno comunista respetar las "libertades fundamentales" y condenó el embargo que impuso Estados Unidos a Cuba hace medio siglo.
Las relaciones Iglesia-Estado fueron difíciles tras la llegada de Fidel Castro al poder en 1959, pero mejoraron considerablemente a partir de la visita del papa Juan Pablo II a la isla, en 1998.
