Las fiestas de San Fermín de Pamplona son una de las celebraciones más polémicas y de las más visitadas que tiene España.
Este festejo se celebra cada año del 6 al 14 de julio, donde toros recorren las estrechas calles de Pamplona antecedidos por cientos de hombres y mujeres que son vistos desde los balcones y a través de los caminos encerrados para los toros.
En la primera jornada, el domingo, los toros tardaron dos minutos y 41 segundos en recorrer los 848 metros.
Jesús, un turista, explicó a la agencia de prensa Afp lo que se siente. "Esta tradición tiene una sensación de adrenalina, que para el mundo, estas tú, el toro y la gente alrededor corre y es una locura, una locura".
"Es emocionante, escuchas a la multitud, moviéndose y todos corren hacia tí y estás como 'ahhhh' y corres", dijo Angie, una turista estadounidense.
Pese a los peligros que esta tradición representa y las advertencias por parte de la Cruz Roja de "especial peligro" debido a la cantidad de gente presente, los sanferminenses continúan su celebración.
Durante este festejo se han reportado tres personas corneadas -dos de ellas estadounidenses- y otras tres sufrieron traumatismos.
Uno de los heridos estaba en condiciones graves de salud tras recibir una cornada en el cuello.
Cualquier persona de más de 18 años puede participar en la carrera, pero las autoridades no dejan de advertir del peligro en una fiesta que ha dejado 16 muertos desde 1911, el último en 2009, según indicó la agencia Afp.
(Redactado por Vanessa Cardona con información de AFP)