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La violación sexual en el manual del soldado soviético y ruso

«Una chica de 14 años fue violada por 5 hombres en Bucha. Ella está embarazada ahora. Un niño de 11 años fue violado delante de su madre. Ella estaba atada a una silla para que lo viera, también en Bucha. Una mujer de 20 años, violada por tres ocupantes de todas las formas posibles a la vez. En Irpen». Esa es la descripción que hace Liudmila Denisova, en el reporte de la Defensora del Pueblo de Ucrania, publicado en su cuenta de Facebook el 8 de abril del 2022.
Desde el pasado mes de marzo las denuncias de violaciones sexuales como herramienta en el arsenal de guerra del ejército ruso llegaban a la prensa internacional y a organismos internacionales.
Las primeras acusaciones recogidas oficialmente provenían de 25 ucranianas, entre 14 y 24 años de edad. Se denunciaba que estas violaciones y abusos sexuales se comenten en grupo, en presencia de hijos, de menores de edad. Son historias que se repiten en los poblados ucranianos tras la retirada de las tropas rusas. Pero, aseguran los especialistas, no siempre las mujeres informan de las violaciones, y las adolescentes, en menor escala todavía.
"Es imposible contar cuántas víctimas hay ahora", dijo Denisova al servicio ucraniano de Radio Europa Libre/ Radio Libertad, "porque muchas personas han sido brutalmente asesinadas. Pero la historia cobra realidad cuando se trata de nuestras mujeres y niños, y sus padres ahora relatan la violencia que se cometió contra ellos".
“Cada vez escuchamos más sobre violaciones y violencia sexual. La combinación del desplazamiento masivo con los resultados de la gran presión de los reclutas y mercenarios y la brutalidad mostrada contra los civiles ucranianos ha levantado todas las banderas rojas”, dijo ante el Consejo de Seguridad de la ONU Sima Bahous, directora ejecutiva de ONU Mujeres, el 11 de abril.
“Las mujeres jóvenes y las adolescentes no acompañadas corren un especial riesgo”, destacó Bahous. La Unicef y ONU Mujeres lanzaron un SOS al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para que se investiguen las denuncias.
La abogada británica Helena Kennedy, Consejera de la Reina (QC) y especializada en derechos humanos, dice que las violaciones se han convertido en un arma de la guerra. Declaró a la prensa inglesa que los soldados rusos disfrutan de un "permiso tácito" para violar a los civiles. Según la abogada, las evidencias que se han podido recopilar revelan que los rusos realizan "graves delitos" contra los ciudadanos. Helena Kennedy es miembro del grupo de trabajo legal que ayuda a coordinar los casos de crímenes de guerra en Ucrania.
Un informe de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), fechado el 13 de abril, confirma violaciones del derecho internacional humanitario por las tropas de ocupación rusa y señala que "los informes indican casos de violencia de género relacionada con el conflicto, como violaciones, violencia sexual o acoso sexual".
Human Rights Watch ha venido documentado las denuncias, incluida la de una mujer que relató a ese organismo cómo fue violada frecuentemente por un soldado ruso en una escuela, en la región de Jarkiv, donde ella y su familia se habían refugiado. Además del relato, entregó fotos con evidencias de las golpizas recibidas.
Un exhaustivo recuento sobre el destino de Karina Yershova fue presentado por la cadena CNN. Era la historia de una joven de 22 años, residente de Bucha, quien se negó a dejar la ciudad al ser tomada por los rusos. Salió un día a comprar a una tienda cercana y los padres no volvieron a saber de ella. Trozos del cadáver de la chica se identificaron por los tatuajes que tenía; fue violada y su cadáver, mutilado.
“Las mujeres de toda Ucrania se enfrentan a la amenaza de la violación como arma de guerra, a medida que surgen crecientes pruebas de violencia sexual en las zonas recuperadas de las fuerzas rusas en retirada”, informaba el diario londinense The Guardian, el pasado 4 de abril.
“El domingo, el mundo se horrorizó con una imagen tomada por el fotógrafo Mikhail Palinchak en una carretera a 20 km de la capital, Kiev, en la que los cuerpos de un hombre y tres mujeres estaban apilados bajo una manta. Las mujeres estaban desnudas y sus cuerpos habían sido parcialmente quemados”, informa la prensa británica en referencia a lo que se informaba desde Bucha. Destaca la nota que, “para muchos, es especialmente difícil comprender la magnitud de la violencia sexual”.
El diario estadounidense Huffington Post recoge declaraciones de la profesora Dara Kay Cohen, de la Universidad de Harvad, quien es autora del libro "Violación durante la Guerra Civil/Rape During Civil War", que analiza esos conflictos desde 1980 al 2012.
Según la catedrática, “la violación se ha utilizado como arma de guerra durante miles de años, pero no se encuentra en todos los conflictos”.
“La violación en grupo ayuda a los grupos armados que sufren de baja cohesión a superar esencialmente ese problema”, detalla Kay Cohen. Esa violación, a criterio de la profesora de política pública en la Escuela de Gobierno John F. Kennedy, de Harvard, es “una forma de señalar la virilidad y la masculinidad, lo que puede crear vínculos sociales entre los miembros de los grupos armados, especialmente los miembros de los grupos armados que han sido reclutados por la fuerza”.
Informaba el diario The Washington Post a inicios de mayo que Iryna Venediktova, dijo que ella “creía que Rusia utilizó la violación como "estrategia deliberada en la guerra”, una acusación que el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, ha negado con insistencia.
Frente a la embajada rusa en Estonia, por varios días, activistas contra la invasión rusa se reunieron para protestar por las violaciones cometidas por las tropas rusas en Ucrania. Docenas de ellas se desnudaban parcialmente, se echaban pintura roja sobre el cuerpo, en especial en el vientre y las piernas. El objetivo era denunciar ante la opinión publica el abuso a mujeres y niños por parte de los soldados rusos en Ucrania.
Violaciones de soldados y oficiales soviéticos desde la Segunda Guerra Mundial.
Hoy día se han documentado numerosos ejemplos de las violaciones de los soldados rusos. Investigaciones, trabajos históricos y libros componen una amplia bibliografía del tema. En ocasiones, han sido llevados al cine y hecho documentales el drama sufrido por las mujeres en aquella zona de Europa a manos de los soldados rusos.
En aquella época, uno de los más ampliamente difundidos entonces sucedió con la toma temporal en octubre de 1944 del poblado de Nemmersdorf, en Prusia Oriental, hoy región rusa de Kaliningrado. Setenta y dos mujeres, en edades de 8 a 83 años, fueron violadas. Las dejaron clavadas en las puertas de las casas y establos, desnudas.
Los nazis documentaron los crímenes e invitaron a suizos, suecos, estonios y españoles a que verificaran las historias. Existe una extensa bibliografía sobre esos crímenes, en los trabajos del historiador británico Ian Kershaw y Alfred-Maurice de Zayas, abogado cubanoamericano.
El historiador británico Antony Beevor, tras laborar en archivos rusos y alemanes, públicó en su obra Berlín, la caída: 1945 (editado en castellano en el 2005 por Critica, Barcelona). Destaca Beevor que “cuando el ejército rojo alcanzó Berlín …sus soldados tendían a mirar a las mujeres como un derecho temporal de conquista”. (Pág. 65) En Dahlem, “monjas, muchachas jóvenes, mujeres ancianas, embarazadas y madres que acaban de alumbrar fueron víctimas de impías violaciones” (pág. 515). Según la investigación del historiador, fueron violadas dos millones de mujeres, la mayoría reiteradamente y en grupos.
En un artículo en la prensa británica el historiador destaca que “al menos dos millones de mujeres alemanas han sido violadas, y una minoría considerable, si no la mayoría, parece haber sufrido una violación múltiple”. La propaganda soviética culpaba a las berlinesas por el alto porcentaje de sífilis y gonorrea entre la soldadesca roja. El que después fuera jefe del espionaje de Alemania Oriental, el general Markus Wolf, en conversación con Beevor, en el 2000, le corroboraba que al llegar a finales de mayo de 1945 a Berlín, “todas nuestras mujeres han sido violadas” (Pag. 655).
Esa tragedia ha sido llevada a la pantalla con la película Una mujer en Berlín, basada en un libro autobiográfico de una alemana. En 1992, el documental BeFreier und BeFreite (Los libertadores se toman libertades) mostraba los testimonios de las víctimas.
El historiador holandés Ian Buruma, autor del libro 1945: Año Cero, constata que las últimas denuncias de violaciones se registraron en 1947, tras ser los soldados soviéticos confinados a los cuarteles. La historiadora Catherine Merridale, en su obra “Ivan’s War/Las Guerras de Ivan” sobre el ejército rojo, del periodo comprendido entre 1939 a 1945, da calificaciones exactas sobre el comportamiento de los soldados soviéticos al llegar a suelo alemán en enero de 1945: “los historiadores los han calificado de bestiales y de crápulas, como si actuaran por algún instinto, como los animales” (pág. 303).
Y esos instintos los continuaron al arribar a la capital alemana en abril de ese mismo año: “ya no había mucho que tomar en Berlín, pero se apoderaron de los alimentos y otros bienes que aún les apetecían. Casi casualmente, y sin el intenso odio de tres meses antes, también se vengaron de las mujeres de Berlín” (pág. 329).
Monumento polaco a la violación soviética
Las polacas no escaparon de las violaciones de los soviéticos. Un artista polaco, Jerzy Bohdan Szumczyk, hizo en el 2013 un monumento a millones de víctimas de la Segunda Guerra Mundial, las mujeres violadas por los soldados del ejército rojo. El diario alemán Der Spiegel describía el monumento y el acto de colocarlo en una plaza polaca. La obra era una escultura de hormigón de 500 libras que se colocó en la ciudad de Gdansk, al lado de un tanque soviético. La obra del entonces estudiante de la Academia de Bellas Artes de Gdansk llevaba el título de "Komm, Frau (Ven, mujer)".
La figura representa a un soldado soviético entre las piernas de una mujer embarazada al tiempo que le coloca un revolver en la boca con su diestra. En esa ciudad, entonces Danzing, fueron violadas alemanas, así como polacas y rusas que eran llamadas Ostarbeiter (trabajadores del Este) en los territorios alemanes u ocupados por estos. La prensa internacional destacó entonces las reacciones de la sociedad polaca, y las protestas de la embajada rusa en Varsovia.
La vergüenza de las húngaras violadas por soviéticos
La cineasta húngara, Fruzsina Skrabski, se encargó de sacar del olvido los abusos y violaciones a las mujeres de su país por las tropas soviética en 1944 y 1945, detalla el diario The Washington Post. En el 2013 saca a la luz el documental titulado “Vergüenza silenciada (Elhallgatott gyalázat)”. Eran los testimonios de las victimas sobrevivientes de aquellas violaciones de la Segunda Guerra Mundial. Se pusieron ante las cámaras para contar el ultraje.
Tras 65 años de silencio, varias de las mujeres ultrajadas, que al ser entrevistadas tenían entre 80 a 90 años, relataron los crímenes. En un poco más de 50 minutos se habla de 400 mil a 800 mil húngaras violadas o torturadas sexualmente. Entonces, en Hungría, el aborto era una práctica normal en los hospitales o consultas clínicas. Las enfermedades de transmisión sexual se dispararon y se relata cómo los soviéticos culpaban a las mujeres por la sífilis o gonorrea de los soldados y oficiales.
El documental muestra mujeres de carne y hueso: Gabi Kali, Magdolna Prosz, Miklos Ujj, Lajos Vincze. Vieron ellas el horror sobre toda la familia, sobre sus hermanas, madres, abuelas. El silencio fue la norma en las décadas de comunismo húngaro, aliado del Kremlin, se destaca en el film, y fue tanto para mujeres como hombres que, inclusive, no deseaban hablar de un tema lacerante.
El experto ruso en sistemas totalitarios, profesor Nikita Petrov, dijo en el documental que la posesión física del soldado soviético sobre el cuerpo de la mujer vencida es un elemento de reafirmación de la propia victoria.
“Entretenimientos” de soldados soviéticos en Yugoslavia
Milovan Djilas, uno de los más acérrimos críticos del marxismo, en su libro “Conversations with Stalin/Conversaciones con Stalin”, afirma que en Yugoslavia el ejército soviético cometió unos 121 casos de violación, 111 de los cuales también fueron asesinatos y 1.204 robos con violencia. Detalla en uno de los capítulos como el líder de los guerrilleros yugoslavos, Yosef Broz Tito, se quejó ante el general soviético Korneev, quien dijo sentirse indignado por los insultos al ejército soviético. (pag. 95 Milovan Djilas, Conversations with Stalin,1962. London)
En un viaje a Moscú, Djilas, entonces miembro de la jerarquía comunista yugoslava, se reunió con Stalin, quien ya conocía de la queja de Belgrado. Stalin le dijo, relata Djilas: “¿No entiende que un soldado que ha caminado miles de kilómetros a través de la sangre, el fuego y la muerte se entretenga con una mujer o se lleve alguna bagatela?"
Quejas al Kremlin desde Checoslovaquia
En el libro The Russian in Germany: A history of the soviet zone of occupation 1945-1949 (Harvard Press, 1995), del historiador Norman M. Naimak se detalla la queja (sin llegar a ser protesta) del líder comunista checo Vlado Klementis al mariscal soviético Ivan Konev por las violaciones a las mujeres a manos de su tropa en Eslovaquia. El militar soviético atribuyo las tropelías contra las mujeres a soldados desertores (pág. 71).
Violaciones de los soviéticos a japonesas en la Manchuria
Una de las atrocidades de las menos conocidas es la masacre de Genenmao, que en Japón es recordado como fecha luctuosa cada año, el 14 de agosto. Ese día, en 1945, con la entrada de las tropas soviéticas y mongolas en la Manchuria, y alentados en ocasiones por la población china, violaron y asesinaron a más de mil personas, en su mayoría mujeres y niños que habían buscado refugio en el templo budista de Gegenmao, en la Mongolia Interior. La matanza duró casi toda la jornada.
Detalles sobre el crimen perpetrado por los soviéticos aparecen en el libro de la historiadora Mayumi Itoh “Los huérfanos de la Guerra japonesa en la Manchuria: las víctimas olvidadas de la Segunda Guerra Mundial”, que salió al público en abril del 2010.
Desmanes sexuales soviéticos en Afganistán
El informe de Human Right Watch, en coordinación con los comités Helsinki Watch y Asia Wacth, publicado en 1985 con el título “Morir en Afganistán: los derechos humanos en Afganistán desde la invasión 1978-1984”, dedica un capítulo a la violencia sexual en los primeros cinco años de invasión soviética. El reporte investigó las violaciones, intentos de violación y acoso sexual a las mujeres afganas por parte de los soldados soviéticos y las fuerzas afganas.
Similar conducta de los soldados soviéticos que violaban a las mujeres y a las niñas es descrita en las publicaciones del Proyecto Afgano de Justicia, publicado en el 2004.
En el 2013 el tema de la brutalidad de las tropas soviéticas es analizada en el trabajo “Violencia sexual en Afganistán en y después de la Guerra”, de Linda Ahmad, en el Instituto de Desarrollo Social y Paz. En el trabajo se afirma que “la violencia sexual en Afganistán apareció al comienzo de la guerra en 1978, cuando la URSS ocupó el país en nombre de la amistad y el internacionalismo”. Se constata en ese estudio que, bajo el régimen afgano que controlaba Moscú, se reportaron casos de participación soviética en las torturas sexuales y violaciones a mujeres en las aldeas.
Respeto al género y condena a los violadores.
En 1929 se firma en Ginebra el Convenio Relativo al Tratamiento de los Prisioneros de Guerra, donde se declara que “los prisioneros de guerra tienen derecho al respeto de su personalidad y honor. Las mujeres serán tratadas con todas las consideraciones debidas a su sexo”. Con el documento se extiende a la mujer como sujeto una defensa especial en medio de la guerra, que de violarse implica discriminación de género. Los adicionales Convenios de Ginebra de 1994, con dos protocolos adicionales de 1974, brinda a la mujer una protección contra la violación, la prostitución forzada o toda forma de ultraje.
En los Estatutos del Tribunal Internacional para la ex-Yugoslavia la violación sexual deja de ser un atentado a la moral convirtiéndose en un crimen contra la humanidad. Se considera violación inclusive el intento y la amenaza. Tres bosnios fueron sentenciados, entre otras causas, por violaciones.
El Tribunal Criminal Internacional para Ruanda declaró culpable de genocidio en 1998 a Jean-Paul Akayesu, ex alcalde de Taba. En ese conflicto se violaron a más de 500 mil mujeres. La condena de Akayesu fue la primera de ese tipo en corte internacional y la primera vez que la violación fue considerada un componente de genocidio. Allí se conceptualizó al delito de violación bajo categóricas situaciones, como genocidio.
La columnista Monica Hesse, del diario The Washington Post, describe como la violación como un tipo de guerra que a su entender “no implica tanques ni bombas, pero es una guerra. Es un crimen que a menudo queda impune, cometido por soldados que forman parte de una horrible tradición: utilizar el cuerpo de las mujeres como campo de batalla, aniquilando la psique humana junto a las ciudades”. Lo considera un arma contra los hombres del bando contrario, pues “los violadores también pueden utilizarlas contra los hombres para hacerles sentir indefensos. Los hombres no podían detener los ataques contra las mujeres que amaban”.
La responsabilidad no solo de los soldados que comenten la violación, sino también de los oficiales que la permiten, quedó bien señalada por Hugh Williamson, director de Europa y Asia Central de Human Rights Watch, quien declaró en un informe especial en abril que "los comandantes deben reconocer que la falta de acción contra los asesinatos y las violaciones puede hacerlos personalmente responsables de crímenes de guerra como una cuestión de responsabilidad de mando".
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Desde la cárcel o el exilio, oposición rusa jura enfrentar a Putin

Tras las rejas en colonias penales o en el exilio en el extranjero, dirigentes de la oposición rusa prometen que seguirán su lucha contra el presidente Vladímir Putin, quien busca un mandato más en las elecciones de marzo.
Aunque creen que Putin será declarado ganador sin importar cómo voten los electores, dicen que esperan socavar el amplio apoyo público que disfruta, cambiar la opinión popular contra la devastadora guerra que desató en Ucrania y mostrar a quienes ya se oponen que no están solos.
"Nadie más que nosotros intervendrá en esta batalla por los corazones y las mentes de nuestros conciudadanos. Así que tenemos que hacerlo y ganar", dijo el encarcelado líder de la oposición rusa Alexei Navalny en una declaración en línea transmitida desde tras las rejas.
Putin, de 71 años, anunció el viernes que volverá a postularse para presidente, para sumar otros seis años a sus dos docenas en el poder. Y podría volver a hacerlo en 2030.
La votación está prevista del 15 al 17 de marzo y su victoria está prácticamente asegurada. La gran mayoría de las figuras de la oposición están encarceladas o han huido del país, casi todos los medios de comunicación independientes han sido bloqueados, y cualquier crítica ha sido silenciada por una serie de leyes represivas sancionadas durante la última década.
"Esto es, básicamente, una garantía de que (el Kremlin) puede declarar cualquier resultado que quiera", dijo Nikolay Petrov, investigador visitante del Instituto Alemán para Asuntos Internacionales y de Seguridad, en una entrevista con The Associated Press.
Algunos activistas coinciden en que no tiene sentido tratar de influir en el resultado de las elecciones. Dicen que aprovecharán la campaña electoral para expresar sus opiniones sobre Putin y su gobierno cuando "los rusos estarán políticamente más activos de lo habitual", según Leonid Volkov, principal estratega y colaborador de Navalny.
"Nuestra tarea es asegurarnos de que los temas que podremos plantear, y llevar a la agenda pública en enero, febrero y marzo, hagan mella, y lo hagan entre los rusos incluso después de las elecciones", dijo Volkov, quien abandonó Rusia hace varios años.
Con ese propósito, Volkov y su equipo lanzaron un proyecto llamado "La Máquina de Campaña de Navalny". La idea es simple: hablar con tantos rusos como sea posible, ya sea por teléfono o en línea, y convencerlos "de que se vuelvan contra los candidatos que odiamos —el candidato Putin y la candidata '(La) Guerra'"—, como lo expresó el propio Navalny en una publicación en línea cuando anunció el proyecto en junio.
A finales de octubre, el proyecto ya contaba con alrededor de 170 voluntarios que hacían llamadas, dijo Volkov, y realizaba una encuesta para determinar las quejas y necesidades específicas de las personas con el fin de adaptar los temas de conversación que utilizarían en llamadas telefónicas futuras.
Volkov dijo que de las miles de llamadas ya realizadas, solo un puñado de personas dijeron estar completamente satisfechas con todo lo que sucede en Rusia y más allá.
Otros tenían al menos una queja. "Alguien está descontento por la guerra, alguien está descontento con la situación económica, alguien está descontento con el sistema de salud, la justicia social... muchas cosas", añadió Volkov.
Hay preguntas que "las autoridades no pueden responder" y, al planteárselas a los rusos, el equipo espera causar "problemas políticos" al Kremlin, explicó Volkov. La incapacidad de las autoridades para abordar estas cuestiones "provocará frustración y dolor, problemas políticos para Putin que no harán más que crecer", agregó.
En la víspera del anuncio de Putin, el equipo colocó varias vallas publicitarias —en Moscú, San Petersburgo y otras ciudades rusas— que decían "Rusia" y "Feliz Año Nuevo", con enlaces y códigos QR que conducen a un sitio web titulado "Rusia sin Putin". Dicho sitio web insta a la gente a "convencer al menos a 10 personas para que actúen contra Putin", y habla de varias formas de hacer campaña.
El Comité Antiguerra —otra fuerza de oposición que une a destacados activistas en el exilio como el exmagnate Mijail Jodorkovsky, el célebre ajedrecista Garry Kasparov y los exlegisladores convertidos en políticos de oposición Gennady Gudkov y su hijo, Dmitry Gudkov— también planea una campaña llamada "¡No a Putin!"
Gennady Gudkov dijo a la AP que el objetivo general de la campaña es explicar a los rusos "cómo puede ser el futuro sin Putin": sin guerra, sin represiones, con el gobierno centrado en cosas como la economía, la ciencia y la educación.
Una posible táctica el día de las elecciones, dijo Gudkov, podría ser instar a los críticos de Putin a acudir a las urnas a una hora determinada para que se formen largas filas que muestren cuántas personas se oponen a él: "Si el país, las élites y el mundo ven largas filas de personas que claramente disienten de las políticas de Putin, será suficiente".
No obstante, un grupo cree que es provechoso presentar candidatos que desafíen a Putin en las urnas. Un proyecto llamado Nuestra Sede Central, lanzado por varios activistas que ayudan a quienes huyen de Rusia a establecerse en el extranjero, promete apoyar a "candidatos democráticos con una posición antibélica".
El coordinador del proyecto, Andrei Davydov, dijo a la AP que pueden ofrecer ayuda a los posibles candidatos con su campaña y los aspectos procesales, como juntar al grupo de 500 personas requeridas por ley para presentar a un candidato independiente, o reunir y verificar las 300.000 firmas necesarias para registrarse en la boleta.
Para obtener el apoyo de Nuestra Sede Central, un candidato debe oponerse a la guerra, estar dispuesto a liberar a los prisioneros políticos e implementar reformas democráticas en Rusia, dijo Davydov. El proyecto ya ha respaldado a una candidata: Yekaterina Duntsova, periodista y abogada de la región de Tver, al norte de Moscú, quien ya fue miembro de la legislatura local. Davydov dijo que estaban en conversaciones con algunas otras personas.
"Necesitamos dar esperanza a la gente, darles la oportunidad de expresarse. No hay otras posibilidades legales (para opinar) en Rusia en estos días, aparte de apoyar a un candidato antibélico", explicó. "La tarea mínima es (lograr) que la gente comprenda que hay muchos de ellos, y que necesitan actuar, defender su posición".
Un objetivo más ambicioso es registrar a un candidato de oposición para desafiar a Putin en la boleta, dijo Davydov. "Trabajaremos para lograr un resultado, una victoria, y veremos qué pasa", agregó.
En una declaración en línea, Navalny instó a quienes lo apoyan a acudir a las urnas el día de las elecciones y votar "por cualquier otro candidato". Es una estrategia similar a la que propuso en 2012, cuando Putin se postuló para presidente tras una pausa de cuatro años en los que se desempeñó como primer ministro debido al límite del mandato presidencial. Esa votación, así como una elección parlamentaria meses antes, provocaron enormes protestas que asustaron al Kremlin y llevaron a una represión contra la disidencia.
Después, en 2018, Navalny pidió boicotear la votación luego de que se le prohibiera participar en la contienda.
Desde entonces, el equipo de Navalny organizó una estrategia de votación para promover a los candidatos locales con mayores posibilidades de derrotar a quienes son respaldados por el partido Rusia Unida, del Kremlin. Aún no se ha utilizado en una elección presidencial.
Ivan Zhdanov, aliado de Navalny, dijo a la AP que el equipo propondrá otras acciones el día de las elecciones, pero se negó a dar detalles.
Maria Pevchikh, directora de la junta directiva de la Fundación Anticorrupción, de Navalny, instó a la Unión Europea, Estados Unidos y Gran Bretaña a "hacer más dolorosa la reelección de Putin" y prometer sanciones contra cualquier celebridad que lo respalde.
"Una cosa es cambiar tu foto de perfil y decir que eres 'Equipo Putin'. Es algo completamente distinto perderlo todo, incluidas tus cuentas bancarias, por participar en la campaña 'electoral' de Putin. Debemos incrementar el costo de tal decisión", explicó. Los gobiernos no han respondido públicamente a su propuesta.
Petrov, el investigador, cree que el mayor temor del Kremlin respecto de las elecciones es que la imagen de Putin podría resultar dañada.
Las elecciones "deben realizarse tranquilamente, con calma y demostrar que la gente acepta a las autoridades tal como son. Y en este sentido, es muy importante para el Kremlin evitar contratiempos, escándalos que puedan poner en duda el resultado que será declarado", dijo Petrov.
Zelenskyy cancela discurso en video ante senadores de EEUU, en medio del debate sobre ayuda militar a Ucrania

El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, canceló un discurso ante los senadores estadounidenses este martes mientras se calentaba el debate sobre la solicitud de casi 106.000 millones de dólares del presidente Joe Biden para financiar las guerras en Ucrania e Israel.
Se esperaba que Zelenskyy defendiera la continuación de la ayuda militar estadounidense a Ucrania mientras se acerca un invierno difícil en el campo de batalla y los bombardeos rusos continúan matando a civiles, informó Radio Europa Libre/Radio Libertad (RFE/RL).
El gobierno de Biden pidió al Congreso en octubre que aprobara el paquete de ayuda, que cubriría no solo la ayuda a Ucrania e Israel, sino también la seguridad fronteriza, pero la Cámara de Representantes, controlada por los republicanos, rechazó la solicitud.
Zelenskyy canceló su discurso en video poco después de que el líder de la minoría del Senado, el republicano Mitch McConnell, dijera a sus compañeros republicanos que votaran en contra de la medida cuando llegue al pleno.
Anteriormente, el 5 de diciembre, el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, emitió un mensaje de línea dura en el que dijo que la seguridad fronteriza de Estados Unidos es "la batalla", y agregó: "Hacemos eso primero, como una prioridad máxima, y nos encargaremos de estas otras obligaciones".
El líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, demócrata de Nueva York, dijo que Zelenskyy había cancelado su discurso en la sesión informativa clasificada, que la administración Biden organizó para subrayar cuán desesperadamente se necesita la ayuda, advirtiendo el 4 de diciembre que la ayuda estadounidense para Ucrania se agotará para fin de año.
En una advertencia contundente, la directora de presupuesto de Biden, Shalanda Young, le dijo en una carta a Johnson que la falta de ayuda militar de Estados Unidos "pondría fin a los esfuerzos del ejército ucraniano, lo que aumentaría las posibilidades de Rusia en el campo de batalla".
"Nuestros paquetes de asistencia de seguridad ya se han vuelto más pequeños y las entregas de ayuda se han vuelto más limitadas", escribió Young.
"Si nuestra ayuda se detiene, causará problemas significativos para Ucrania. Si bien nuestros aliados en todo el mundo han dado un paso adelante para hacer más, el apoyo de Estados Unidos es fundamental y no puede ser replicado por otros", subrayó.
Ayuda de Holanda
En Kyiv, el ministro de Relaciones Exteriores holandés, Hanke Bruins Slot, dijo el martes que los Países Bajos aumentaron su apoyo a Ucrania, anunciando 2.500 millones de euros para apoyar al país en 2024.
Bruins Slot dijo que su país abrió un centro de entrenamiento para F-16 en Rumania en noviembre y está trabajando con Estados Unidos, Dinamarca y otros países para que Ucrania pueda desplegar los aviones de combate lo antes posible.
Los acontecimientos se producen cuando las fuerzas ucranianas están enzarzadas en un combate cuerpo a cuerpo con las tropas rusas en torno a la ciudad industrial de Avdiyivka. Las fuerzas rusas llevan varias semanas intentando rodear la ciudad de la región oriental de Donetsk, que se ha convertido en un símbolo de la resistencia ucraniana, precisó RFE/RL.
(Con información de RFE/RL, Reuters, AP y AFP)
"Somos rehenes oficialmente": Cómo ataque a kibutz israelí reveló la estrategia de Hamás

El ataque de Hamás contra el kibutz Nir Oz comenzó poco después de las 6:30 a.m. del 7 de octubre y duró hasta bien entrada la tarde, cuando docenas de milicianos arrasaron la comunidad sin oposición y con una misión aparente: capturar a la mayor cantidad posible de civiles.
Para cuando el último combatiente se fue, uno de cada cinco residentes de Nir Oz era rehén. Los residentes restantes salieron de sus habitaciones seguras y se reunieron en un refugio donde pasaron la larga noche contando a los desaparecidos.
Tras ocho semanas de guerra entre Israel y Gaza, la reciente liberación de docenas de rehenes israelíes —con muchos todavía en cautiverio— genera un nuevo enfoque sobre lo que Hamás hizo el 7 de octubre, el día en que sus milicianos los tomaron de comunidades de todo el sur de Israel. El kibutz Nir Oz, que los extremistas arrasaron sin oposición, es quizás el mejor lugar para comprender la estrategia de toma de rehenes de Hamás, una operación sin precedentes tanto en su alcance como en su ejecución.
Más de 100 extremistas palestinos irrumpieron en Nir Oz el 7 de octubre durante horas y se marcharon con unos 80 de sus aproximadamente 400 residentes. Eso significa que la gente de Nir Oz constituía un tercio de los 240 rehenes tomados en total y casi la mitad de los israelíes liberados, con más de 30 aún en Gaza.
Para los israelíes, Nir Oz encarna la vulnerabilidad de su país ese día, con la ausencia de las fuerzas de seguridad israelíes, la captura de civiles desprotegidos, sus muertes y desapariciones en Gaza y su posterior intercambio por palestinos.
Los hombres que dispararon contra el puesto de guardia la madrugada del 7 de octubre fueron los primeros de unos siete grupos de combatientes armados. Llevaron a cabo su plan sin descanso mientras los mensajes iban y venían en el chat del kibutz y en los grupos de WhatsApp.
9:16 a. m.: "¿Cómo se cierra la habitación segura????"
10:15 a. m.: "Somos rehenes oficialmente".
10:19 am "Están amenazando con volar la casa si no abrimos".
Uno a uno, la gente abandonó el flujo de mensajes. Algunos aparecieron más tarde en vídeos de Hamás. Una madre aterrorizada —con los ojos ensanchados por el miedo— abraza a sus dos pequeños pelirrojos mientras se los llevan envueltos en una manta. Un niño es arrastrado por las axilas. Una mujer de edad avanzada es puesta de pie tras caer de una motocicleta.
Los tomados como rehenes en el kibutz tenían edades comprendidas entre los 9 meses y los 85 años. Más de la mitad eran mujeres y niños. Los 13 rehenes israelíes liberados en el primer intercambio el 24 de noviembre eran de Nir Oz y fueron la moneda de cambio para la libertad de 39 prisioneros palestinos en Israel.
Una revisión de cientos de mensajes entre residentes de Nir Oz compartidos en exclusiva con The Associated Press, entrevistas directas con 17 y relatos de muchos más, imágenes de cámaras de seguridad y los propios manuales de instrucciones de Hamás sugieren que el grupo planeó con mucha anticipación tener como objetivo a civiles. Cuatro expertos en situaciones de rehenes coincidieron en que las acciones de Hamás, tanto el día del ataque como después, indicaron un plan para tomar civiles y prepararse para la guerra que vendría.
Danielle Gilbert, politóloga de la Universidad Northwestern, quien investiga tomas de rehenes, dijo que Hamás y otros grupos armados generalmente utilizan a los rehenes como escudos humanos o como moneda para negociar un intercambio. Pero la diferencia aquí, agregó, es que la mayoría de los grupos armados toman hombres adultos sanos.
"Es extremadamente raro que los grupos armados secuestren a niños, que secuestren a mujeres, que secuestren a ancianos o a otras personas vulnerables", explicó. "El secuestrador necesita estar seguro de que su rehén pueda sobrevivir al cautiverio".
Hamás ha insinuado que deseaba capturar rehenes, pero ha sido vago en declaraciones públicas sobre si planeaba secuestrar a tantos civiles.
"Quedamos asombrados por el colosal colapso (del ejército de Israel). Planeábamos y esperábamos ganar; entrar en los asentamientos y llevarnos lo que queríamos y tomar rehenes. Pero este ejército era un tigre de papel", dijo Ali Barakeh, funcionario de Hamás en Beirut, a The Associated Press el 9 de octubre.
La intención deliberada también se expone en un manual titulado "Cómo tomar cautivos", que el ejército israelí dijo haber encontrado en extremistas de Hamás muertos en otro kibutz atacado el 7 de octubre: "Separar y aislar (a mujeres y niños/hombres). Matar a los difíciles y a los que representan una amenaza".
Escondido en su habitación segura en Nir Oz, Eyal Barad reconfiguró su cámara de seguridad para ver qué sucedía afuera. Una camioneta blanca se detuvo frente a su casa y un grupo de hombres armados saltó de ella y salió de la pantalla. Durante aproximadamente media hora, la pantalla se llenó con el movimiento de motocicletas, bicicletas, maquinaria agrícola robada y hombres armados.
Un atacante emergió por la izquierda, jalando firmemente de las manos a un hombre desarmado claramente reacio. Desaparecieron de la pantalla.
Unos minutos más tarde pasó una motocicleta con tres personas. Una capucha cubría el rostro de la persona atrapada en el medio, mucho más pequeña que las otras dos.
Desde la casa de enfrente, un hombre armado se posicionó cerca de una ventana cerrada. Un segundo hombre abrió la contraventana de metal y sacó a una mujer. Le cubrieron la cara y la cabeza con un paño blanco.
"Parecía muy ensayado", dijo Barad. "Parecía que este era el plan".
En otra casa cercana, dos hermanos adolescentes llamaron a su madre. En la línea telefónica abierta, Renana Gome Yaacov escuchó que la puerta de la habitación segura se abría de golpe y voces que gritaron en árabe, que ella no entiende. Su hijo menor intentó razonar con los hombres.
"Pude escucharlo decirles: 'No me lleven. Soy demasiado joven'", refirió. La comunicación se cortó.
Un video palestino filmado bajo la luz de media tarde muestra una procesión relativamente ordenada de automóviles, motocicletas y equipos agrícolas robados que se dirigen de regreso a Gaza a través de los campos. Y, sobre vehículos de dos y cuatro ruedas, a rehén tras rehén.
Hamas liberó a la mayoría de las mujeres y niños de Nir Oz durante la breve tregua, incluida la mujer que Barad vio con su cámara y los dos hijos de Yaacov, pero todos los hombres siguen desaparecidos en Gaza. Y las noticias de la muerte de algunos de ellos en Gaza han comenzado a llegar lentamente.
Gilbert se mostró pesimista sobre lo que representan los intercambios para el futuro con Hamás, al menos a corto plazo. Temió que fuera una práctica que Hamás considerara relativamente exitosa y que potencialmente valdría la pena repetir.
Una de las primeras rehenes en ser liberada, Yocheved Lifshitz, dijo en una conferencia de prensa que fueron separados por kibutz tras llegar a Gaza. Unos días después, Yehya Sinwar, el líder de Hamas se reunió con los rehenes de Nir Oz, refirió más tarde a los medios israelíes. Un médico venía algunos días para revisarlos y atender a un hombre herido.
"Nuestras necesidades fueron satisfechas", dijo. "Se prepararon para esto. Estaban preparados desde hace mucho tiempo".
España encausa a dos agentes secretos por presuntamente filtrar información a EEUU

La justicia española investiga a dos agentes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) por presuntamente filtrar información clasificada a Estados Unidos, confirmó la ministra de Defensa, Margarita Robles, después que medios locales revelaran la noticia.
“Quiero decir que sí hay un procedimiento judicial y que ha sido una denuncia del Centro Nacional de Inteligencia”, dijo Robles durante una visita a las tropas españolas en Letonia, y evitó brindar más detalles.
Por su parte, Félix Bolaños, ministro de Presidencia y Justicia, reveló que el gobierno español ya tenía información sobre el caso “desde hace unos días”.
“Ahora lo que procede es que se desarrolle la investigación judicial y que, por tanto, toda la documentación y la colaboración que nosotros podamos aportar, desde luego que lo haremos, para que se esclarezcan cuanto antes estos hechos”, señaló.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de España no respondió inmediatamente a una solicitud de opinión sobre posibles afectaciones en las relaciones bilaterales con Estados Unidos.
En tanto, en Washington, Jake Sullivan, asesor de Seguridad Nacional, dijo en rueda de prensa en la Casa Blanca: “No tengo ningún comentario sobre ese informe hoy”.
De acuerdo con medios españoles, uno de los agentes del CNI se encuentra ya detenido, y el otro, en libertad con cargos.
Israel amplía sus órdenes de evacuación y lleva su ofensiva al sur de Gaza entre fuertes bombardeos

Las fuerzas israelíes dijeron el domingo que han ampliado su ofensiva terrestre contra el grupo Hamás a "todas las partes" de la Franja de Gaza.
Israel reanudó el viernes su ofensiva luego que acabó una tregua de una semana. Tras enfocar sus operaciones terrestres en el norte de Gaza las últimas semanas, Israel empezó a realizar ataques aéreos contra el sur también. La gran mayoría de la población ha huido al sur en busca de seguridad.
Pero el domingo en la tarde, el vocero militar israelí, almirante Daniel Hagari, dijo que el ejército en tierra también está avanzando en el sur.
"El ejército israelí está continuando y expandiendo la operación terrestre contra la presencia de Hamás en todas las partes de la Franja de Gaza", afirmó.
El ejército israelí ordenó el domingo la evacuación de más zonas en la segunda ciudad más grande de la franja de Gaza, Jan Yunis, y sus alrededores, y siguió con sus intensos bombardeos, conforme su ofensiva se desplazaba a la mitad sur del territorio, donde dijo que se ocultaban muchos líderes de Hamás.
Los palestinos de Gaza dijeron que ya casi no tienen a dónde ir. La Franja de Gaza, un territorio estrecho entre Israel y Egipto, está sellada. Muchos de sus 2,3 millones de habitantes están atestados en el sur luego que Israel ordenó a la población civil abandonar el norte del enclave al inicio de la guerra, iniciada por el ataque de Hamás contra Israel, en que el grupo palestino mató a unas 1.200 personas, en su gran mayoría civiles, y secuestró a otras 240.
Previo a las órdenes de evacuación más recientes, monitores de Naciones Unidas dijeron que las zonas bajo órdenes de evacuación constituyen alrededor de una cuarta parte del territorio.
Durante la noche y la madrugada se reportaron intensos bombardeos en la zona de Jan Yunis y de la ciudad sureña de Rafah, así como partes del norte que eran el blanco principal de la dura campaña aérea y terrestre israelí.
Muchos de los 2,3 millones de habitantes del territorio están hacinados en el sur después de que las fuerzas israelíes ordenaran a los civiles que abandonaran el norte en los primeros días de los dos meses de guerra.
Juliette Toma, directora de comunicaciones de la agencia de la ONU para refugiados palestinos, dijo que cerca de 958.000 personas estaban en 99 instalaciones de la ONU en el sur de la Franja de Gaza.
El comisionado de derechos humanos de la ONU Volker Türk llamó al fin de la guerra, afirmando que el sufrimiento de los civiles era "imposible de soportar".
Con la reanudación de los combates menguaron las esperanzas de negociar otra tregua temporal. Un cese el fuego que duró una semana, hasta el viernes, había facilitado la liberación de docenas de rehenes israelíes y extranjeros en Gaza y de palestinos encarcelados por Israel.
"Seguiremos librando la guerra hasta que alcancemos todos sus objetivos, y es imposible alcanzar esos objetivos sin la operación terrestre", dijo el primer ministro, Benjamin Netanyahu, en un mensaje televisado el sábado por la noche.
Osama Hamdan, funcionario de Hamás, dijo que cualquier reanudación de negociaciones sobre futuros intercambios tendrán como condición un cese de fuego permanente.
En Washington el vocero del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, dijo al programa "Meet the Press" de la NBC que Estados Unidos está "trabajando realmente duro" para lograr una reanudación de las negociaciones.
El ejército israelí amplió el domingo sus órdenes de evacuación en Jan Yunis y sus alrededores y pidió a los habitantes de al menos cinco zonas y vecindarios más que se marcharan por su propia seguridad.
Los residentes dijeron que el ejército israelí dejó caer panfletos que ordenaban a los residentes que se movieran al sur, a Rafah, o a una zona costera en el suroeste. "La ciudad de Jan Yunis es una zona de combates peligrosa", indicaban los papeles.
El principal hospital en Jan Yunis recibió al menos tres muertos y docenas de heridos el domingo por la mañana por un ataque israelí contra un edificio residencial en el este de la ciudad, según un periodista de Associated Press en el hospital.
Por otro lado, los cuerpos de 31 personas fallecidas en bombardeos israelíes en el centro de la Franja de Gaza fueron trasladados al hospital Mártires de Al Aqsa, en la ciudad central de Deir al Balah, indicó Omar al-Darawi, administrativo de ese hospital.
Videos de AP mostraban cadáveres en bolsas corporales en el suelo ante el hospital de Dier al Balah mientras docenas de personas ofrecían plegarias fúnebres el domingo por la mañana. Los cuerpos fueron cargados después en un camión para enterrarlos.
Una mujer lloraba sentada en una silla mientras acunaba el cuerpo de un niño en su regazo. Otro adulto llevaba el cuerpo de un bebé al camión.
Observadores de Naciones Unidas dijeron en un comunicado emitido antes de las nuevas órdenes de evacuación que las zonas a las que se había dirigido a la población suponían apenas un cuarto del territorio del enclave. En esas zonas vivían casi 800.000 personas antes de la guerra.
Antes de que se reanudaran los combates, Estados Unidos, el aliado más cercano de Israel, había advertido a Israel que evitara un nuevo desplazamiento masivo significativo.
El ejército israelí dijo el domingo que sus cazas y helicópteros "alcanzaron objetivos terroristas en la Franja de Gaza, incluidos túneles terroristas, centros de mando y almacenes de armas" durante la noche, y que un dron había matado a cinco combatientes de Hamás.
En el norte de Gaza, rescatistas con equipamiento escaso trataban de excavar el domingo entre los restos de edificios en el campo de refugiados de Jabaliya y otros vecindarios en Ciudad de Gaza para buscar posibles sobrevivientes y recuperar cadáveres.
"Atacan en todas partes", dijo Amal Radwan, una mujer que se refugiaba en Jabaliya, un campo de refugiados urbano. "Hay un ruido constante de explosiones a nuestro alrededor".
Mohamed Abu Abed, que vive en el vecindario Sheikh Radwan de Ciudad de Gaza, también dijo que había ataques aéreos y fuego de artillería constante en su barrio y los alrededores.
"La situación aquí es inimaginable", dijo. "La muerte está en todas partes. Uno puede morir en un instante".
El Ministerio de Sanidad en Gaza, que está gobernado por Hamás, dijo que la cifra total de muertos en el enclave desde el comienzo de la guerra el 7 de octubre había sobrepasado los 15.200, un gran incremento desde la cifra anterior de más de 13.300 fallecidos publicada el 20 de noviembre. El ministerio no distingue entre civiles y combatientes muertos, aunque dijo que el 70% de ellos eran mujeres y niños. Más d 40.000 personas han resultado heridas desde que comenzó la guerra.
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