Los hermanos holguineros Adairis, Anairis Miranda y Fidel Batista Leyva, miembros del Movimiento Cubano Reflexión, iniciaron este viernes su tercera huelga de hambre tras recibir amenazas muerte.
"Nos han amenazado de muerte, nos amenazaron con incendiarnos la casa y con quitarnos la custodia de los niños", dijo Adairis Miranda Leyva.
Según los hermanos, un vecino identificado como Nelson los ofendió y los amenazó de muerte. El hombre es el esposo de Ruby Guillén González, auxiliar de la Seguridad del Estado.
"Comenzó a ofendernos y amenazarnos de muerte; vociferando que iba a quemar nuestra casa, y en la calle nos va a matar a golpes. Incluso vino a nuestra puerta e intentó abrir la reja para darnos golpes. Aunque tenemos el video y testigos de todo esto, no podemos ir a denunciarlo en la Policía porque seguimos en total desamparo legal e indefensión jurídica".
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Adairis Miranda Leyva, entrevistada por Alberto Muller
Los activistas dijeron que las autoridades también han iniciado un proceso para retirarles los niños.
Explicaron que este viernes "se presentaron en nuestra casa dos trabajadoras sociales que notificaron el comienzo de un nuevo proceso penal contra la familia para retirarnos la custodia legal de los niños. Ambas mujeres se negaron a revelar sus nombres, pero admitieron que son la coordinadora de prevención de menores y coordinadora general de los CDR de la zona, respectivamente".
Tahimí Rodríguez Miranda, de 11 años, y Alay Michel Rodríguez Miranda, de 10, hijos de Adairis, no asisten a la escuela desde hace cuatro meses, porque fueron "agredidos durante un acto de repudio" en su escuela, señalan los opositores.
Los hermanos Leyva y su madre Maidolis Leyva fueron arrestados el 27 de noviembre de 2016, dos días después de la muerte del dictador Fidel Castro.
En el juicio que tuvo lugar el 12 de enero de 2017 la madre fue condenada a un año de restricción de libertad y los hijos fueron sancionados a un año de trabajo correccional con internamiento por supuestos delitos de "difamación de héroes y mártires y desorden público".
Los tres fueron liberados de forma condicional en abril, pero poco después, en el verano iniciaron otra huelga de hambre para protestar por la intimidación a la que fueron sometidos por las autoridades.