El sindicalista independiente Iván Hernández Carrillo informó que fue liberado sin cargos en la noche del lunes tras ser golpeado, arrestado y sacado por la fuerza del aeropuerto de La Habana el domingo, cuando regresó de su viaje a Estados Unidos y Europa.
El opositor, que fue liberado en el 2012 pero permanece con el estatus de licencia extrapenal, había sido autorizado a salir al extranjero por única vez.
Carillo explicó a la periodista Ivette Pacheco, de Radio Martí, que tuvo "un intercambio de palabras con los funcionarios de migración" en el aeropuerto Internacional José Martí, cuando estos insistían en revisar su equipaje.
"Querían llevarme a un cuarto para un control aduanal y querían revisar el equipaje, de una manera no habitual", explicó el exprisionero del grupo de los 75.
"Los funcionarios de migración utilizaron la fuerza brutal para conducirme para el lugar donde pretendían hacerme el chequeo fuera de los límites de la zona de migración", relató.
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Reportaje de Amado Gil, de Radio Martí.
Liberado sin cargos
Tras arrestarlo, los funcionarios dijeron a Carrillo que había sido acusado de "desobediencia". Sin embargo, "la causa fue sobreseída", explicó Carrillo, quien narró este martes otros detalles de la detención.
"Me arrastraron mientras otros me golpeaban, me daban patadas y otro me tapaba la boca para que no gritara", dijo el opositor.
"Luego me sacaron del aeropuerto en dos autos y me entregaron a la policía para que me llevara al cuartel de Santiago de Las Vegas, donde permanecí detenido desde el domingo en la mañana hasta las 11 y media de la noche", relató.
Tras ser liberado, conoció que no será llevado a juicio ni le impondrán multa por delito alguno.
Este martes en la mañana, Carrillo se disponía a buscar su equipaje en las Oficinas de Emigración del aeropuerto José Martí, donde han permanecido desde su llegada el domingo.
Critican represión en EEUU
Un comunicado emitido por el congresista cubanoamericano, Mario Díaz-Balart, catalogó de "indignante" la detención de Carrillo.
Díaz-Balart se ha opuesto, junto a otros congresistas de origen cubano, a la actual política de Barack Obama hacia Cuba, por considerar que su administración ha cedido a la peticiones del Gobierno de la isla, sin que este se comprometa a respetar los derechos humanos, políticos y civiles de los ciudadanos cubanos.