El conductor del programa La Hojilla, Mario Silva, deberá acudir en los próximos días ante la Fiscalía General de la República con el fin de rendir declaraciones "en calidad de testigo" por la investigación que realiza el organismo a la grabación que sostuvo el comunicador con Aramis Palacio, Teniente Coronel de la Seguridad del Estado.
“Mario Silva debe concurrir en los próximos días al Ministerio Público para ser entrevistado por la fiscal en torno a los hechos que aparecen en las denuncias”, informó la Fiscal General, Luisa Ortega Díaz.
La investigación a cargo de la fiscal Gineira Rodríguez tendrá en cuenta "la experticia de coherencia técnica”, expresó la Fiscal General de Venezuela.
La grabación deja ver una presunta conspiración del líder de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello y de casos de corrupción entre la cúpula chavista.
El audio fue divulgado por diputados opositores, encabezados por el exchavista Ismael García, quienes luego hicieron una petición formal en la sede de la Fiscalía General en Caracas para que se realizara una investigación.
El diputado Ismael García declaró durante una rueda de prensa que esta grabación evidencia una "situación extremadamente grave” que pone de manifiesto la injerencia cubana en Venezuela. El político agregó que el material “se entregaría a Raúl Castro, quien orienta y dirige la política de este país".
Por su parte, Silva había rechazado categóricamente las acusaciones hechas por la oposición venezolana sobre la veracidad de la cinta y dijo que bien podría tratarse de un “montaje” del diputado Ismael García.
El conductor ya había dicho en su cuenta de Twitter que el audio era un "bodrio que montó el Mossad” (servicios secretos de Israel).
“"He decidido ponerme a derecho para que las instituciones de justicia, hagan lo que deban hacer, no les temo a los fascistas y mucho menos a la derecha que vino a sustituir lo más perverso de la cuarta república (…) que me investiguen”, declaró Silva en un comunicado presentado durante la transmisión de su último programa.
Silva se despidió de su teleaudiencia alegando “razones de salud” tras el escándalo de la grabación.
“Mario Silva debe concurrir en los próximos días al Ministerio Público para ser entrevistado por la fiscal en torno a los hechos que aparecen en las denuncias”, informó la Fiscal General, Luisa Ortega Díaz.
La investigación a cargo de la fiscal Gineira Rodríguez tendrá en cuenta "la experticia de coherencia técnica”, expresó la Fiscal General de Venezuela.
La grabación deja ver una presunta conspiración del líder de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello y de casos de corrupción entre la cúpula chavista.
El audio fue divulgado por diputados opositores, encabezados por el exchavista Ismael García, quienes luego hicieron una petición formal en la sede de la Fiscalía General en Caracas para que se realizara una investigación.
El diputado Ismael García declaró durante una rueda de prensa que esta grabación evidencia una "situación extremadamente grave” que pone de manifiesto la injerencia cubana en Venezuela. El político agregó que el material “se entregaría a Raúl Castro, quien orienta y dirige la política de este país".
Por su parte, Silva había rechazado categóricamente las acusaciones hechas por la oposición venezolana sobre la veracidad de la cinta y dijo que bien podría tratarse de un “montaje” del diputado Ismael García.
El conductor ya había dicho en su cuenta de Twitter que el audio era un "bodrio que montó el Mossad” (servicios secretos de Israel).
“"He decidido ponerme a derecho para que las instituciones de justicia, hagan lo que deban hacer, no les temo a los fascistas y mucho menos a la derecha que vino a sustituir lo más perverso de la cuarta república (…) que me investiguen”, declaró Silva en un comunicado presentado durante la transmisión de su último programa.
Silva se despidió de su teleaudiencia alegando “razones de salud” tras el escándalo de la grabación.