Más de 170 migrantes cubanos están varados en Serbia

Raúl O. García Pupo y Rafael Lozada Cordero, dos cubanos refugiados en Serbia.

Forman parte de una inusual afluencia de migrantes cubanos que comenzaron a llegar a la península balcánica en 2015 antes de que los vecinos países de la Unión Europea (UE) cerraran sus fronteras para cientos de miles de refugiados que huían de la guerra y de la pobreza.

Las estadísticas oficiales en Serbia muestran que 170 cubanos se registraron enese país en 2017, aunque el número es sin duda más alto ahora, debido a que muchos se rehúsan a registrarse ante las autoridades por temor a ser deportados.

Forman parte de una inusual afluencia de migrantes cubanos que comenzaron a llegar a la península balcánica en 2015 antes de que los vecinos países de la Unión Europea (UE) cerraran sus fronteras para cientos de miles de refugiados que huían de la guerra y de la pobreza.

Como muchos cubanos que han llegado a la península balcánica, la familia de Michael Amor primero voló a Rusia y posteriormente a Serbia vía Montenegro, donde los cubanos pueden conseguir visas de turista en los aeropuertos.

Ahora, la familia de tres se encuentra varada en Serbia, que no pertenece a la Unión Europea y que es el último lugar en el que quisieran estar, además de Cuba.

“Sé que la vida acá es difícil, muy, muy difícil”, dijo Amor a la AP, sentado en una litera al lado de su esposa Ingrid y de su hija Samira, de 13 años.

“El viaje hacia aquí no se lo desearía a nadie. La vida es muy difícil. Lo que quiero es tener una vida un poco mejor para mi hija”, expresó Amor.

En el centro de refugiados de Sot, Serbia, situado a unos metros de la frontera con Croacia, la familia Amor comparte un pequeño cuarto con una familia somalí de cuatro integrantes, lo que deja poco espacio para la privacidad o comodidad.

Amor dijo que trató de buscar asilo en Croacia, miembro del bloque, pero que fue rechazado. Apenas puede pagar por comida y no tiene dinero para que los contrabandistas de migrantes lleven a su familia más allá de la frontera de forma ilegal.

“No sé qué hacer, pero tenemos que seguir intentando”, afirmó.

En Cuba, Amor trabajaba en la construcción y ganaba solamente 30 dólares al mes. La familia tuvo que vender su pequeña casa y otras pertenencias para comenzar el viaje hace 18 meses. Michael Amor esperaba llegar a España y reunirse con algunos familiares, pero se quedó varado en Serbia luego de que las naciones de la UE tomaron medidas enérgicas en los pasos fronterizos.

“Si tuviéramos que hacer el viaje de nuevo, lo haría. Pero no sé cuál va a ser el final de esto, no sé si llegaré a España y podré reunirme con mi familia”, agregó.

“Prefiero estar aquí en un campamento con mi hija que en una prisión en Cuba”, aseveró Amor.

En 2013 el gobierno de Cuba retiró casi todas las restricciones de viaje a sus ciudadanos. Sin embargo, la capacidad de viajar al extranjero depende de la voluntad de los gobiernos de otros países para expedir visas a los cubanos, algo que las naciones de la UE y otros países occidentales hacen en raras ocasiones.

La mayoría de los migrantes cubanos en Serbia que esperan llegar a territorio de la UE dijeron que no tienen otra opción más que hacer el viaje, luego de que Estados Unidos revocó el estatus de migración especial de los cubanos a principios del año pasado, el cual les permitía quedarse en el país si lograban llegar a territorio estadounidense.

La cancillería de los Países Bajos implementó el pasado mes de enero un visado de tránsito para los cubanos que hagan escala en su territorio rumbo a un tercer país ante el aumento en los últimos meses del número cubanos que piden asilo en sus aeropuertos.

(Escrito por Pablo Alfonso, con información de la agencia AP)