EEUU retira 60% de personal diplomático en Cuba y paraliza entrega de visas

Autos de diplomáticos estadounidenses frente a la embajada en La Habana.

Estados Unidos está retirando aproximadamente un 60 por ciento de su personal diplomático de Cuba y advirtiendo a los viajeros estadounidenses que no deben visitar la isla debido a "ataques específicos" que han lesionado a los enviados estadounidenses.

Washington está ordenando regresar a todo el personal no esencial de la embajada en La Habana, junto con todos sus familiares. Sólo quedará en la sede "personal de emergencia".

La retirada de un 60% de los estadounidenses se consideró un paso importante para reducir la exposición de individuos que podrían ser blancos de estos ataques.

Estados Unidos también está advirtiendo a los ciudadanos estadounidenses que podrían resultar perjudicados si viajan a Cuba.

Una advertencia de viaje del Departamento de Estado indica que se han producido "ataques específicos", contra diplomáticos en hoteles, un término que deja atrás el más conservador de "incidentes".

"Debido a que la seguridad de nuestro personal está en riesgo y no podemos identificar la fuente de los ataques, creemos que los ciudadanos estadounidenses también pueden estar en riesgo y se les advierten que no viajen a Cuba".

Por otra parte Estados Unidos está deteniendo indefinidamente el procesamiento de visas en Cuba.

Ninguna visa regular u ordinaria será emitida por ahora en La Habana.

Los cubanos que necesiten visados para ingresar a Estados Unidos podrían hacer el trámite a través de embajadas y consulados de EE.UU. en otros países.

Estados Unidos también dejará de enviar delegaciones oficiales a Cuba, aunque las discusiones diplomáticas continuarán en Washington.

Las medidas seguirán vigentes hasta que Cuba pueda asegurar que los diplomáticos estadounidenses están a salvo.

Cuba fue informada sobre las decisiones este viernes, a través de su embajada en Washington.

El secretario de Estado, Rex Tillerson, decidió reducir el personal de la embajada anoche, mientras viajaba a China, después de considerar otras opciones que incluían un cierre total de la sede.

El presidente Donald Trump revisó con él las opciones en una reunión a principios de semana.

La drástica medida fue adoptada apenas tres días después de una reunión en Washington entre el Secretario de Estado, Rex Tillerson, y el canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, para discutir precisamente los extraños incidentes.