2018: Angola sin Dos Santos y Cuba sin Castro

Raúl Castro recibe al presidente de Angola, José Eduardo Dos Santos (d), hoy 21 de septiembre de 2007.

El partido oficialista de Angola se declaró victorioso el jueves en las elecciones generales en la que sale del juego el mandatario José Eduardo dos Santos, que gobernó ininterrumpidamente por 38 años sin reducir el persistente abismo entre la riqueza natural del país y la pobreza rampante.

Con cinco millones de votos contados, el Movimiento Popular para la Liberación de Angola (MPLA) se declaró vencedor en las elecciones del miércoles en base a proyecciones de los centros de votación, informó Associated Press (AP) citando un medio local.

Si se confirma, el resultado allana el camino para que el ministro de defensa, el general João Lourenço, de 63 años, reemplace a Dos Santos.

Las elecciones en las que participaron 9,3 millones de angoleños son clave para el rico país petrolero, que se debate entre la pobreza, la corrupción y denuncias por violaciones de los derechos humanos.

Dos Santos, de 74 años y con problemas de salud, podría continuar al frente del MPLA.

Estas son las cuartas elecciones de la historia de Angola desde su independencia en 1975. Las anteriores fueron en 1992, 2008 y 2012. En 2012, el MPLA consiguió 175 de los 220 escaños, y Dos Santos
fue reelegido presidente.

El delfín de Dos Santos

Si llega al poder, el general Lourenço tiene el reto de sacar al país de una profunda crisis económica, con el lastre de cerca de tres décadas de guerra civil y atrapada en una economía que se basa casi exclusivamente en el petróleo.

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Votantes por primera vez en Angola

La bendición de Dos Santos le llegó adelantada. En el acto de cierre de campaña del MPLA, el mandatario apareció junto a Lourenço: "Será elegido próximo presidente de Angola", dijo en una breve intervención, en que reiteró "apoyo personal" a su eventual sucesor.

Cuba

López Callejas con el presidente de Angola Eduardo Dos Santos en Mariel.

El nuevo triunfo de MPLA es beneficioso para Cuba, ahora que los nexos históricos se tornan cada vez más pragmáticos.

En la década de 1970, más de 300.000 soldados de Cuba fueron a parar al campo de batalla en Angola, en virtud del apoyo que ofreció Fidel Castro al MPLA. Esa guerra costó la vida a miles de cubanos, muchos quedaron mutilados y enfermos.

La Habana y Luanda establecieron relaciones diplomáticas en noviembre de 1975. Pero la vieja alianza se transformó. Actualmente, más de 4.000 cubanos trabajan en Angola como colaboradores en los sectores de salud, educación, deportes, agricultura, ciencia y tecnología, energía y minas.

La eventual retirada de Dos Santos, prevista para febrero próximo, coincide con el traspaso de poderes en Cuba, donde se espera que Raúl Castro sea reemplazado ese mismo mes por su primer vicepresidente, Miguel Díaz Canel.

Los detractores de Dos Santos lo critican por haber ubicado a parientes cercanos en cargos clave de la nación africana.

Incluso el MPLA se opuso, por ejemplo, a la sucesión dinástica del hijo del presidente, José Filomeno de Sousa dos Santos, quien desde 2013 ejerce el cargo de jefe del Fondo Soberano de Angola.

Su familia tiene además importantes negocios en el país. La hija del mandatario, Isabel Dos Santos, es la directora de la petrolera estatal, Sonangol, y también la mujer africana más rica del continente.

El contexto de las elecciones se desarrolla en un país nada transparente ni libre para la prensa o para los opositores. Como en Cuba, las manifestaciones públicas están prohibidas y los periodistas impedidos de ejercer su oficio libremente.

(Con reporte de Associated Press, Efe, Afp, Reuters y El Mundo)


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