Presos políticos y activistas de derechos humanos denuncian "hambruna" en cárceles cubanas

Vista desde una celda del patio del Combinado del Este, prisión de máxima seguridad en La Habana. (AFP/Adalberto ROQUE/Archivo)

Las condiciones que enfrentan los presos políticos en el sistema penitenciario cubano continúan deteriorándose, especialmente por la falta de una alimentación adecuada, denunciaron a Radio Televisión Martí reclusos y activistas desde la isla.

“Qué clase de crimen hay con la situación de los alimentos aquí, además de ser insuficiente la que están dando. Ayer les anunciaron a los reclusos en el comedor que se le iba a disminuir la porción del arroz, y el plato fuerte que dan es líquido, dijo desde el penal de Kilo-7, en la ciudad de Camagüey, Virgilio Mantilla Arango, fundador de la Unidad Camagüeyana por los Derechos Humanos.

El opositor, enfermo y sin medicamentos, y quien cumple tres años y tres meses de cárcel por el presunto delito de “daños a la propiedad”, señaló que las condiciones de higiene también son deplorables.

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“Aquí se violan los derechos nutricionales de los reclusos"

“Ya llevamos dos meses que nos están dando la mitad de un jabón de lavar, que no alcanza para nada. Cada día las cosas van para atrás, estamos pasando hambre y necesidad, esto es criminal, lo que nos están es matando”, aseguró.

También en el penal del Kilo-8, en Camagüey, el activista Reinier Calderín Socarrás alertó sobre las precarias condiciones y el robo de alimentos por parte de miembros de la guarnición del penal.

“Aquí se violan los derechos nutricionales de los reclusos, hay reducciones de las porciones de los alimentos y, producto a esta situación, los reos están desnutridos. Hace tiempo que esto sucede para justificar el robo de comida por parte de los militares, siendo el principal responsable el Teniente Coronel y Jefe de Cárceles y Prisiones, Eider Sierra Ochoa”, afirmó Calderín Socarrás.

Mientras tanto, se encuentra en celda de castigo en la prisión Combinado Sur, en Guantánamo, el periodista independiente Yordi García Fournier, de 47 años de edad, sentenciado a tres años y dos meses de prisión por los presuntos delitos de “desacato” y “desordenes públicos”, por su participación en las protestas del 11J en esa provincia.

“El también prisionero político y manifestante del 11 de julio, Jesús Rodríguez, encarcelado en ese penal, dijo al Consejo de Relatores que Yordi está reclamando su derecho a las llamadas telefónicas y otros derechos de reclusos”, dijo a Radio Martí el periodista independiente y miembro del Consejo de Relatores, Juan Carlos González Leyva.

“Entre las acciones sufridas por García Fournier se encuentran requisas y agresiones físicas, confinamiento y privaciones de todo tipo”, incluidos los medicamentos y la alimentación, añadió.

González Leyva llamó, además, la atención sobre el caso del activista del Movimiento Cristiano Liberación Ezequiel Morales Carmenate, de 59 años de edad, actualmente en la prisión El Típico, en Las Tunas, donde cumple una condena de dos años y medio de cárcel por el presunto delito de “desacato”.

“Él se encuentra extremadamente delgado por la hambruna que sufren en ese penal, y el hacinamiento y las chinches le impiden dormir a los reos. Así se lo comunicó vía telefónica su esposa, Rosa Martínez, al Consejo de Relatores”, dijo el comunicador.