Entre alegría e incertidumbre, un grupo de 180 cubanos de los 7.800 varados en Costa Rica se apresta este martes a salir de este país en un plan piloto para que reanuden su ruta migratoria hacia Estados Unidos a través de Centroamérica y México.
Con la paciencia que han vivido durante ya dos meses en Costa Rica, desde que Nicaragua les negó el paso por su territorio, los cubanos esperaban en los albergues ubicados en la pequeña comunidad de La Cruz, provincia de Guanacaste, cerca de la frontera nicaragüense.
En las horas previas a su partida, los migrantes se cortaban el pelo, jugaban baloncesto o simplemente descansaban; pero se manifestaron ansiosos por reanudar su viaje.
Otros, dijeron sentir una incertidumbre por los miles que aún quedarán a la espera del viaje, pero la alegría entre ellos era unánime.
Yeleine Céspedes, una enfermera oriunda de Cienfuegos, dijo a EFE que "ha sido muy duro" el periodo que han estado varados en Costa Rica y dijo que está "loca por que llegue el momento" de salir, hoy a las 22:35 hora local (04.35 GMT del miércoles) en un vuelo chárter con destino a El Salvador.
"Hoy nos vamos mi mamá, mi prima y un muchacho que vino con nosotros. Hay personas que hemos conocido y compartido con ellos en la travesía que ya somos como una familia. Hemos pasado momentos duros, momentos buenos, momentos lindos y momentos malos", expresó la migrante.
Céspedes dijo sentir incertidumbre por los cubanos que quedarán a la espera de salir de Costa Rica y, a la vez, comentó que para los primeros se trata de una "responsabilidad muy grande" cumplir con orden su ruta migratoria.
Cubanos ansiosos por dejar Costa Rica y continuar travesía a EEUU
Una vez en El Salvador, este grupo se movilizará por tierra hacia Guatemala y la frontera de este país con México, bajo la supervisión de los Gobiernos de la región y la Organización Internacional para las Migraciones.
Los cubanos debieron asumir el costo de este traslado que fue fijado en $555 por cada uno.
En México los migrantes deberán buscar por sí mismos la forma de llegar a Estados Unidos, donde esperan aprovechar las ventajas migratorias que les otorga la Ley de Ajuste Cubano.
Julio César Arcia, quien en Camagüey trabajaba en una pizzería, es otro de los isleños que partirá este martes de Costa Rica, algo que le llena de felicidad porque le permitirá cumplir "el sueño americano".
"Este sentimiento que tengo adentro no hallo cómo explicarlo. Me siento motivado, contento de ser de los primeros 180 cubanos del plan piloto. Es uno de los anhelos de todos nosotros el sueño americano. Esto es un regalo de Dios", explicó.
Arcia salió de Cuba el 18 de octubre pasado y fue uno de los primeros en quedar varado en Costa Rica desde el cierre de la frontera nicaragüense el 15 de noviembre, cuando incluso unos 800 de ellos fueron repelidos por el Ejército nicaragüense al intentar entrar ilegalmente a ese país.
"Presencié todo lo ocurrido en Costa Rica. La travesía ha sido una experiencia que contar a mis hijos y nietos. Salí a Ecuador, luego a Colombia, a Panamá y luego a Costa Rica y aquí fue la trampa de la vida, pero lo importante es que estamos con vida", dijo.
En el plan piloto no participan niños, pues las autoridades prefirieron no agregar la variable de personas vulnerables.
Ante esto, la cubana Marisleydys Ruiz espera que la prueba sea un éxito, para viajar a Estados Unidos lo más pronto posible con su hijo de cuatro años, Samuel Alejandro González, quien padece el síndrome Wolff-Parkinson White que afecta los ventrículos del corazón.
El menor necesita medicamentos que ya le escasean y una operación para que le coloquen un catéter. Con ayuda de cubanos en Estados Unidos, la mujer logró que el enviaran medicamentos, pero sólo para un tiempo reducido.
Se prevé que 24 horas después de la salida del primer grupo de Costa Rica se conozcan los resultados del plan piloto para que las autoridades evalúen los puntos a mejorar y se convierta en el mecanismo definitivo que solucione la crisis migratoria.