La troupe del gobernador de Nueva York se topa con la pobreza abyecta de los cubanos

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Visita Cuba el gobernador Andrew Cuomo.

Andrew Cuomo quiere que su estado tenga una presencia económica en la isla.

El diario The New York Times titula "Cuomo sigue optimista después de ver los retos de hacer negocios en Cuba" un reportaje sobre la visita que inició el lunes a la isla, el gobernador de Nueva York.

Andrew Cuomo, al frente de una delegación de empresarios de su demarcación, es el primer gobernador de un estado de la Unión norteamericana en viajar a La Habana desde que se anunció el deshielo en las relaciones Cuba-EEUU.

El Times señala que los acompañantes de Cuomo en su viaje relámpago de 26 horas aprendieron rápidamente una lección sobre los retos de hacer negocios en Cuba: "Vieron una pobreza abyecta y una infraestructura mal desarrollada".

Sin embargo, el entusiasmo de Cuomo era ostensible mientras caminaba por las calles adoquinadas de La Habana Vieja o metía la cabeza bajo el capó de un viejo Chevrolet con motor adaptado de Toyota. "Tenía que venir a Cuba para ver esto", exclamó el gobernador. Cuomo le auguró al dueño del "almendrón" que pronto podrá comprar un motor reconstruido de Chevrolet para instalárselo a su preciada posesión.

Pero el Times recuerda que igualmente evidentes se hicieron los obstáculos que encontrarán los estadounidenses para hacer negocios en la isla. Y no es sólo el paisaje de vallas con la consigna "Socialismo o Muerte", o de cubanos gritando "USA Go Home", a los que el funcionario neoyorquino restó importancia, como consecuencia de los "fuertes sentimientos" que genera el cambio.

Según manifestó Cuomo, citado por el periódico, el cambio está llegando a Cuba y Nueva York estará allí para capitalizarlo. Acerca del historial de La Habana en materia de Derechos Humanos, fue igualmente optimista con respecto a que "el propio deshielo en las relaciones hará avanzar a Cuba en otra dirección".

También expuso el visitante su interpretación personal del relajamiento de restricciones comerciales ordenado por el presidente Obama:

"Al parecer, el Gobierno Federal tiene la capacidad de emitir licencias mediante las cuales es posible hacer negocios (con Cuba) antes de que se levante el embargo, y esas licencias están en el control del Gobierno Federal. Así que ahora es cuestión de encontrar una relación de negocios que funcione para Cuba y para Estados Unidos, y luego obtener las licencias del gobierno federal".

Ante el optimismo del líder estatal, el diario procura poner los pies sobre la tierra: "Las compañías de Nueva York que esperan hacer negocios en Cuba enfrentan empinados obstáculos. La decisión del presidente Obama para mejorar las relaciones diplomáticas, y el anuncio, la semana pasada, de que se propone sacar a Cuba de la lista de Estados Patrocinadores del Terrorismo, abrirán la puerta para que los bancos estadounidenses operen en Cuba. Pero hará falta una ley del Congreso para derogar el embargo comercial y es probable que los dos países tarden todavía años en decidir la forma que tomará su relación".

El interés principal del Gobierno de Cuba en la visita fue evidenciado por la cartera del ministro cubano con quien se entrevistó Cuomo: el de Comercio e Inversión Extranjera Rodrigo Malmierca. Luego fue recibido por el vicepresidente Miguel Díaz-Canel.

El Times apunta que los empresarios que acompañaron al gobernador en la misión comercial esperaban sostener entrevistas individuales con sus similares cubanos. Por ejemplo, ejecutivos del yogurt Chobani y de la empresa de ingredientes lácteos Cayuga Milk tenían una reunión programada con "un distribuidor local de leche".

El diario no precisa quién sería ese distribuidor, pero probablemente se trata de la Empresa (estatal) de Productos Lácteos, considerando que en el socialismo cubano el comercio exterior es prerrogativa de las empresas del Estado.

Esa empresa, por cierto, paga mal a los productores privados obligados a venderle la leche, lo que ha redundado en una caída sostenida de la producción en los últimos años. Y sólo "distribuye" el alimento original a las personas con dieta médica y los niños menores de siete años.