Venezolanos exponen en las redes dulce vida de los "enchufados" del régimen

Rudy Aissami (de amarillo, der.) esposa del vicepresidente de Venezuela Tareck el Aissami, fue expuesta en Instagram con un reloj Richard Mille que puede costar casi de $115.000

Publicar detalles sobre los exhuberantes escenarios y estilos de vida de dirigentes del régimen de Maduro y sus familares se ha convertido en un fenómeno, y en un arma de la oposición.

Una es mostrada tirando besos desde un jet privado. Otra se ve posando frente a una joyería de lujo Cartier en China. Otros sonríen mientras despachan un plato de langosta o un inmenso cake de cumpleaños.

Activistas venezolanos están publicando cada vez más detalles sobre los escenarios y estilos de vida de dirigentes de izquierda y sus familias, representando cómo prosperan gracias a la corrupción mientras la población pasa trabajos para poder comer en medio de la devastadora crisis económica.

Estos destapes en los medios de comunicación social contra funcionarios y sus socios en los negocios, sus familiares e incluso sus amantes (los llamados enchufados), son un arma más en la ola de masivas protestas que enfrenta al gobierno del presidente Nicolás Maduro desde abril.

Los manifestantes reclaman elecciones presidenciales anticipadas, libertad para los activistas encarcelados y ayuda humanitaria para aliviar la escasez crónica de alimentos y medicinas.

Una cuenta de Twitter publicó fotos que presuntamente muestran a la esposa del Vicepresidente Tareck El Aissami, Rudy, bebiendo champán y relajándose en una prístina playa con sus hermanas (En otra se la muestra con un reloj de pulsera Richard Mille en la muñeca izquierda, y al lado el precio de la pieza: casi $115.000 ).

En otro caso, la sospechada amante de un poderoso funcionario del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) aparece viajando por el Medio Oriente.

La oposición venezolana acusa a los funcionarios de lucrar con los controles monetarios y con un decenio de altos precios del petróleo para llenar sus bolsillos.

La Asamblea Nacional, en la que la oposición tiene amplia mayoría, estima que al menos 11.000 millones de dólares han "desaparecido" de la petrolera estatal PDVSA.

El gobierno alega que Venezuela, un país rico en petróleo, ha estado plagada por la corrupción durante décadas, y que las autoridades están tratando de extirpar unas cuantas manzanas podridas.

Los activistas han lanzado sus dardos contra el jefe de la Fuerza Armada, Vladimir Padrino, acusando a sus tropas de excederse en el uso de la fuerza contra los manifestantes y atacándolo a través de una foto que supuestamente muestra a su hija en una postura embarazosa.

"Despiértate, Vladimir Padrino. Tenemos una foto de tu hija que te va a encantar", escribió el jueves en Twitter @VVperiodistas, administrado por comunicadores.

Luego la cuenta publicó una foto que supuestamente muestra a la hija de Padrino, Yarizedt, y a dos amigas en una fiesta y con los pechos al aire, una instantánea que habría aparecido antes en Snapchat.

Reuters no pudo autenticar las múltiples denuncias hechas en las redes sociales ni contactar con las familias expuestas. El Ministerio de Información y la Fuerza Armada Nacional de Venezuela no respondieron a preguntas específicas sobre los casos mencionados ni sobre la generalizada tendencia.

Pero Maduro ha dicho que las tácticas de hostigamiento en las redes son sólo otro frente de lo que él ha llamado una "insurrección armada" en las calles. En un discurso el mes pasado, comparó el ciberacoso a funcionarios, simpatizantes del gobierno y sus familiares con la persecución nazi contra los judíos.

Los activistas se han enfocado en particular en chavistas antiguos o actuales a los que llaman hipócritas por vivir en Estados Unidos, el enemigo ideológico del movimiento socialista fundado por el fallecido Hugo Chávez.

Los operadores de un feed de Twitter, @YosoyJustin, dijeron que han encauzado su ira contra la vida privada de los funcionarios y sus familiares en respeuesta a la represión lanzada por Maduro contra la reciente ola de protestas.

Pero a algunos en la oposición les molesta una campaña que consideran poco ética o contraproducente ya que, según dicen, alimenta el odio y podría complicar una posible transición.

"No es moral ni políticamente correcto acosar a los hijos de los funcionarios", dijo recientemente el legislador de la oposición Freddy Guevara, y sugirió que ello podría desalentar a los jóvenes de criticar a sus padres, como hizo en abril Yibram Saab, el hijo del ombudsman venezolano Tareck William Saab.(Yibram marchó en abril con los opositores y leyó una carta en la que denunciaba la brutal represión y le pedía a su padre poner fin a la injusticia).

'ELLOS ESTÁN ENCANTADOS'

Los activistas de los medios de comunicación social, que declinaron dar entrevistas en persona alegando amenazas y razones de seguridad, desestiman las críticas.

"No creemos que esto vaya a fomentar la unidad chavista", dijo @YoSoyJustin en una respuesta por escrito a las preguntas.

"Al contrario, hacemos ver a seguidores del chavismo que han sido engañados y obligados a sufrir escasez en Venezuela mientras estas familias engordan sus cuentas bancarias en el extranjero".

Dos de las principales cuentas de Twitter detrás de los ataques en las redes sociales dicen que sus equipos están anegados a diario en decenas o hasta cientos de denuncias sobre funcionarios del gobierno y sus familiares o asociados, denuncias que ellos procuran verificar antes de publicarlas.

"Sabíamos que había corrupción, pero nunca (imaginamos) estos niveles, especialmente el alardear de ello en las redes sociales", dijo @VVperiodistas, que tiene cerca de un millón de seguidores.

Al menos tres hijos de destacados dirigentes del PSUV bloquearon sus cuentas de Facebook en las últimas semanas.

"Exponer en las redes a los funcionarios del gobierno y sus familiares ... se ha convertido en un fenómeno", añadió @YoSoyJustin.

(Reuters. Traducción de Rolando Cartaya)