EE.UU advierte en la ONU de posibles nuevas acciones militares en Siria

Nikki Haley, embajadora de EE.UU en la ONU

"Estados Unidos tomó una decisión muy mesurada la noche pasada" con el ataque a una base aérea siria, explicó Haley en el Consejo de Seguridad. "Estamos dispuestos a hacer más, pero esperamos que ello no sea necesario", añadió.

La embajadora estadounidense ante la ONU, Nikki Haley, amenazó este viernes con una nueva acción militar de su país en Siria, un día después de un bombardeo dispuesto por Washington contra posiciones del régimen sirio en represalia por un presunto ataque químico imputado a Damasco.

"Estados Unidos tomó una decisión muy mesurada la noche pasada" con el ataque a una base aérea siria, explicó Haley en el Consejo de Seguridad. "Estamos dispuestos a hacer más, pero esperamos que ello no sea necesario", añadió.

El Consejo de Seguridad se reunió en una sesión de emergencia para discutir las acciones de Estados Unidos en Siria, que Rusia señaló como una "flagrante violación del derecho internacional y un acto de agresión" contra Siria.

Haley dijo que los ataques con misiles destruyeron un campo aéreo desde el cual Estados Unidos cree fueron lanzados los supuestos ataques químicos contra la ciudad de Jan Sheijun, controlada por los rebeldes.

"Estábamos plenamente justificados para hacerlo", dijo.

"Estábamos plenamente justificados para hacerlo", dijo. La embajadora estadounidense recordó que "el Mecanismo de Investigación Conjunto ha encontrado más allá de toda duda que el régimen sirio ha utilizado armas químicas contra su propio pueblo en varias ocasiones".

El Mecanismo de Investigación Conjunto de la OPAQ y las Naciones Unidas para Siria fue establecido por unanimidad del Consejo de Seguridad en agosto de 2015, con el propósito de identificar a los responsables de ataques con armas químicas en ese país.

En su tercer informe emitido el 30 de agosto de 2016, el mecanismo constató lo que calificó de "pruebas suficientes" en tres casos de uso de armas químicas entre 2014 y 2015: uno con gas mostaza por Estado Islámico, y dos con gas de cloro contra civiles por parte de la fuerza aérea siria.

Ochenta y seis personas, entre ellas al menos 27 niños, murieron en Jan Sheijun el martes en un ataque con armas químicas que Estados Unidos atribuyó a la fuerza aérea de Bashar al Asad después de rastrearlo en sus radares y sistemas de vigilancia.

"Estados Unidos ya no esperará a que Asad use armas químicas sin consecuencias", dijo Haley. "Esos días han terminado", añadió.

La embajadora estadounidense también dijo que era hora de proseguir en la búsqueda de una solución política a la guerra de seis años.

"Ahora debemos pasar a una nueva fase: un camino hacia una solución política a este horrible conflicto", subrayó.

Haley volvió a señalar a Rusia por no controlar a su aliado y dijo que Moscú debe reconsiderar su apoyo a Asad.

"El mundo está esperando que el gobierno ruso actúe de forma responsable en Siria. El mundo espera que Rusia reconsidere su alianza con Bashar al Asad", dijo.

Estados Unidos disparó 59 misiles crucero Tomahawk desde buques de guerra en el Mediterráneo contra la base aérea de Shayrat, causando fuertes daños.

El ataque -la mayor decisión militar de Trump desde que asumió el cargo- marcó una dramática escalada en la participación estadounidense en la guerra civil de Siria.

Se produjo luego de días de indignación por unas imágenes de niños muertos y víctimas sufriendo convulsiones por el supuesto ataque con gas sarín en la ciudad de Jan Sheijun.