Nilsa visitó el pasado miércoles los contenedores emplazados en un patio de La Habana Vieja acompañada del presidente del Parlamento cubano, Ricardo Alarcón de Quesada, según reporta el New York Times.
En este caso se trata de Nilsa Castro Espín, quien se dejó alimentar por los chefs estadounidenses que por estos días presentan en la XI Bienal de La Habana el Proyecto Paladar, donde se improvisa un pequeño restaurant en contenedores.
Nilsa visitó el pasado miércoles los contenedores emplazados en un patio de La Habana Vieja acompañada del presidente del Parlamento cubano, Ricardo Alarcón de Quesada, según reporta el New York Times.
Ambos cenaron conejo a la brasa con vino blanco y romero y un postre llamado Nesquik panna cotta con cardamomo, canela, vainilla y piñones, describe la periodista Victoria Burnett.
Los organizadores de este performance han establecido que los cubanos comen gratis y han invitado lo mismo a curadores, artistas, como Renny Arozarena recordado por su interpretación de Benny Moré en la película El Benny, y a quienes ayudaron a montar el restaurant.
Hasta ahora la mayoría de los extranjeros que han cenado allí son estadounidenses.
“Queremos que la gente conozca a los cubanos y coma junto a ellos en lugar de verlos en el otro lado del mostrador” asegura Craig Shillitto, el arquitecto y artista que encabeza el proyecto.
Nilsa visitó el pasado miércoles los contenedores emplazados en un patio de La Habana Vieja acompañada del presidente del Parlamento cubano, Ricardo Alarcón de Quesada, según reporta el New York Times.
Ambos cenaron conejo a la brasa con vino blanco y romero y un postre llamado Nesquik panna cotta con cardamomo, canela, vainilla y piñones, describe la periodista Victoria Burnett.
Los organizadores de este performance han establecido que los cubanos comen gratis y han invitado lo mismo a curadores, artistas, como Renny Arozarena recordado por su interpretación de Benny Moré en la película El Benny, y a quienes ayudaron a montar el restaurant.
Hasta ahora la mayoría de los extranjeros que han cenado allí son estadounidenses.
“Queremos que la gente conozca a los cubanos y coma junto a ellos en lugar de verlos en el otro lado del mostrador” asegura Craig Shillitto, el arquitecto y artista que encabeza el proyecto.