La Unión Europea condenó el lunes el asesinato del Presidente del Consejo de Gobierno de Iraq, Ezedin Salim, los secuestros y asesinatos de rehenes y las torturas en las cárceles.
En una de las conclusiones que aprobaron los ministros de Relaciones Exteriores de Unión Europea reunidos en Bruselas, Bélgica, "condenaron todo tipo de abuso y degradación de prisioneros en Iraq, que son contrarios al Derecho Internacional y a la Convención de Ginebra".
Los cancilleres europeos condenaron "los secuestros y brutal asesinato de rehenes, sobre todo la salvaje ejecución" del civil americano Nicholas Berg, y pidieron que sean liberados inmediatamente otros rehenes y que sus captores desistan de esas actividades.
Expresaron "preocupación de que la actual campaña de violencia terrorista esté conduciendo a significativa pérdida de vidas, sobre todo de civiles, y esté impidiendo el camino al progreso político y la reconstrucción económica de Iraq".
Unión Europea declaró también que "espera con ansiedad el traspaso de la soberanía de Iraq a un gobierno de transición a fines de junio y la celebración de elecciones nacionales" en un proceso donde el Consejo de Seguridad dé "vital y creciente" participación a Naciones Unidas.