Según se tiene entendido, los temas predominantes serán la guerra de Iraq y la guerra contra el terrorismo internacional. Se estima que 50 millones de electores inscritos lo presenciarán en la televisión nacional.
Los estrategas políticos de Bush y Kerry han acordado hasta el más mínimo detalle para la serie de tres debates: No habrá apuntación de ninguna índole, ni preguntas directas cruzadas entre los candidatos, ni imágenes del participante
que no tiene la palabra mientras el otro habla.
Hasta se llegó a un acuerdo sobre la temperatura ambiental del aire acondicionado del recinto donde se librará el primer duelo verbal de 90 minutos que comienza a las 9 P.M. del jueves.
Según sondeos de opinión pública, el presidente Bush llega a este primer debate con sólida ventaja sobre Kerry. En la encuesta del Instituto Pew divulgada el martes, Bush aventaja a Kerry, con 48% de las adhesiones contra 40%.Tambien el sondeo del diario The Washington Post y la cadena ABC publicado el martes, refleja que Bush tiene "sólida ventaja" sobre Kerry.
En opinión de los expertos, si Kerry sale airoso de este debate sobre temas de política exterior, en particular Iraq, la campaña permanecerá abierta. De lo contrario, Bush, de 58 años, podrá asegurarse la reelección.
El debate es "algo difícil de preparar porque él (Kerry) cambia todo el tiempo de opinión sobre el tema de la guerra contra el terrorismo", dijo jocosamente Bush el lunes pasado. Agregó que Kerry cambia tanto de opinión, que "podría pasar los 90 minutos debatiendo consigo mismo".
Kerry respondió criticando a Bush diciendo que su humor bromista estaba mal ubicado: "Cuando soldados americanos están expuestos al peligro, los americanos no quieren solamente bromas de su Presidente; quieren escuchar la verdad", dijo Kerry.