El colombiano Santiago Giraldo disputará su segunda final en el circuito de la ATP, al vencer el sábado a Nicolás Almagro en las semifinales del Abierto de Barcelona.
Giraldo, 65to en el ranking de la ATP, se impuso 7-5, 6-3 sobre el español que el viernes eliminó a Rafael Nadal.
"Siempre he soñado con alcanzar los primeros puestos en el ranking de la ATP, y mañana es un primer paso", expresó el oriundo de Pereira, quien enfrentará en la final del domingo al japonés Kei Nishikori. "Mantengo la calma, conservaré mi rutina y mañana será un día para disfrutar y jugar el mejor tenis posible".
Giraldo buscará su primer título en la ATP, luego de perder en 2011 la final del torneo de Santiago de Chile.
Almagro indicó que Giraldo "rozó la perfección, sobre todo en el primer set, y no pude encontrar una respuesta".
El español rechazó que haya sufrido un bajón después de vencer por primera vez a Nadal.
El primer set parecía encaminado a un desempate, hasta que Giraldo se lo llevó al robarle el servicio a Almagro con una devolución de derecha que picó a los pies del finalista del año pasado.
"El creyó más en su tenis, en cómo tenía que jugar, y casi no cometió errores", analizó Almagro. "Cometí errores cuando pude irme al frente. Esa fue la clave".
Giraldo, 65to en el ranking de la ATP, se impuso 7-5, 6-3 sobre el español que el viernes eliminó a Rafael Nadal.
"Siempre he soñado con alcanzar los primeros puestos en el ranking de la ATP, y mañana es un primer paso", expresó el oriundo de Pereira, quien enfrentará en la final del domingo al japonés Kei Nishikori. "Mantengo la calma, conservaré mi rutina y mañana será un día para disfrutar y jugar el mejor tenis posible".
Giraldo buscará su primer título en la ATP, luego de perder en 2011 la final del torneo de Santiago de Chile.
Almagro indicó que Giraldo "rozó la perfección, sobre todo en el primer set, y no pude encontrar una respuesta".
El español rechazó que haya sufrido un bajón después de vencer por primera vez a Nadal.
El primer set parecía encaminado a un desempate, hasta que Giraldo se lo llevó al robarle el servicio a Almagro con una devolución de derecha que picó a los pies del finalista del año pasado.
"El creyó más en su tenis, en cómo tenía que jugar, y casi no cometió errores", analizó Almagro. "Cometí errores cuando pude irme al frente. Esa fue la clave".