Noriega declaró al concluir una visita de 24 horas a Puerto Príncipe que la creciente violencia política pone a prueba el proceso electoral haitiano.
El funcionario exhortó a la fuerza de paz comandada por Brasil a tomar la iniciativa para responder a la ola de delincuencia y disuadir la violencia.
La transición democrática debe continuar en Haití, pero es puesta a prueba por quienes usan la delincuencia para fines políticos, dijo Noriega tras reunirse con el primer ministro interino, Gerard Latortue, y otros funcionarios haitianos.