La Casa Blanca dijo el jueves que se están endureciendo las medidas de seguridad porque hay una ininterrumpida corriente de información que indica que Al-Kaeda pudiera llevar a cabo un ataque terrorista para desestabilizar las elecciones presidenciales de noviembre próximo.
El Secretario de Seguridad Interna, Tom Ridge, informó sobre la situación y dijo que aunque Al-Kaeda tiene la capacidad potencial para atacar a Estados Unidos antes de la elección, el gobierno no piensa aumentar el nivel de alerta. Aseguró que ahora Estados Unidos está mejor equipado para protegerse.
Según Ridge, el país dispone de mejores y más modernos instrumentos de defensa interna que se emplearán para proteger las convenciones políticas previas a la elección, aunque no se tienen pruebas de que haya planes para atacarlas cuando se celebren en Nueva York y Boston. Subrayó que la vigilancia ciudadana es muy importante para ayudar a fortalecer la defensa nacional contra este tipo de agresión no convencional.
Dijo Ridge que se cree Al-Kaeda puede encontrarse ahora en una fase de preparativos terroristas porque quiere "desestabilizar nuestros procedimientos democráticos". Manifestó que el candidato presidencial demócrata John Kerry y su candidato vicepresidencial John Edwards han sido provistos de medidas secretas de protección.
Ridge agregó que tiene confianza en la credibilidad de las fuentes de información que tiene su departamento y que por eso el nivel de seguridad y de vigilancia de los organismos gubernamentales de protección es ahora más elevado que nunca antes aunque no hay planes para incrementar el nivel de la amenaza de terrorismo en sí.
No ofreció información específica, pero dijo que el Servicio Secreto trabaja con las agencias de tránsporte masivo y que Estados Unidos ya tiene "en su lugar" las medidas de seguridad que juzga necesarias. El Secretario de Seguridad Interna subrayó que el Centro Nacional de Operaciones es un organismo de protección antiterrorista "muy diligente".
En horas más tempranas del jueves, el Secretario de Prensa de la Casa Blanca, Scott McClellan, dijo a los periodistas que el Departamento de Seguridad Interna estaba tomando medidas contra la amenaza de Al-Kaeda y ya había dado los pasos necesarios para "fortalecer la seguridad".
En días pasados otros altos funcionarios federales advirtieron que Al-Kaeda pudiera estar planeando un ataque de envergadura en Estados Unidos con motivo de la elección presidencial. Uno de estos funcionarios fue el Secretario de Justicia, John Ashcroft, que hizo su advertencia durante una visita a Miami, Florida.