El opositor cubano Miguel Borroto fue trasladado al hospital de la prisión Combinado del Este, en La Habana, tras permanecer más de 20 días plantado en protesta contra los abusos sufridos durante su detención.
La Dama de Blanco Gladis Capote pudo visitarlo este lunes y describió a Radio Martí su situación. "Está muy delgado" y tiene todavía el "estómago inflamado de las patadas que le dieron cuando lo arrestaron", señaló.
Borroto fue arrestado el 15 de octubre durante un allanamiento a su vivienda en La Habana y conducido a la unidad policial de San Miguel del Padrón, conocida como la Oncena.
Una vez en el lugar, los represores lo golpearon estando esposado y lo sometieron tres veces al método de tortura conocido como el submarino, sumergiendo su cabeza en el agua de una cisterna, denunció el opositor Zaqueo Báez Guerrero, quien estuvo detenido en la misma unidad policial.
El artista independiente Luis Manuel Otero Alcántara, quien coincidió con Borroto en la Oncena durante una de sus detenciones, confirmó el testimonio de Baéz Guerrero.
A consecuencia del encierro está adolorido y tiene los pies muy hinchados. Las marcas de las esposas aún están visibles en sus muñecas, añadió Capote.
"Me dijo que está esperando a ver qué decisión van a tomar con él, porqué él no cometió ningún delito".
El opositor permanece detenido bajo acusaciones de "atentado" y "desacato", figuras delictivas a los que recurre la Seguridad del Estado para encausar a disidentes. Capote explicó que Borroto "estaba plantado" (en referencia a que no acata las disposiciones disciplinarias de la cárcel) en protesta contra las falsas acusaciones.
Borroto, activista del Movimiento Libertad Democrática para Cuba, fotografía y graba cada domingo las escenas de represión y detención arbitraria a la que son sometidas las Damas de Blanco, y en varias ocasiones ha sido arrestado junto a ellas.