Un juez venezolano ordenó en julio pasado que cuatro miembros del grupo Súmate, dedicado a la defensa de derechos políticos en el país, fueran enjuiciados por acusaciones de conspiración.
Las denuncias se fundaron en la organización de un referendo en el año 2004, sobre el mandato de Chávez, y recibieron fondos de la estadounidense Fundación Nacional para la democracia.
En la carta dirigida a Chávez, McCain se unió a la ex secretaria de Estado, Madeleine Albright, y al directivo de la Fundación, Vin Weber, al describir el juicio como una grave amenaza a la democracia en Venezuela.