El director del “Mirror”, Piers Morgan, defendió la autenticidad de las fotografías que, según el diario, fueron entregadas por soldados del Regimiento de la Reina "Lancashire", que sería el supuesto implicado en el caso.
El portavoz de la oposición conservadora (los “tories”) para asuntos de defensa, Michael Ancram, considera que las fotos del “Mirror”, pudiesen tener, “consecuencias de la mayor gravedad para las tropas en Iraq y la reputación británica en todo el mundo”.
Por su parte el primer ministro Tony Blair declaró también en la Cámara de los Comunes que las instantáneas eran “casi seguro falsas” y su Ministro de Defensa, Geoff Hoon, señaló que las fotos parecían un “engaño”.
Algunos comentaristas internacionales piensan que estas imágenes, genuinas o no, pudiesen ya haber afectado la reputación de las tropas británicas ante el mundo árabe, ya que su publicación estaría tratando de establecer una conexión sicológica con algunos soldados americanos que encaran juicios y acusaciones por maltrato a los prisioneros iraquíes