Una coalición de ocho facciones rebeldes sirias instaron hoy a la comunidad internacional a que "cumpla con su deber de acabar con el Estado Islámico" (EI) y anunciaron la creación de una sala conjunta de operaciones para combatir a los yihadistas. En un comunicado, publicado en la página web de las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo, los grupos sirios solicitaron a los miembros del EI que deserten de esta organización, que calificaron de "criminal".
EI Estado Islámico proclamó a finales de junio un califato en Irak y Siria, donde se ha hecho con amplias partes del territorio.
Además, pidieron a todo aquel que se oponga al EI que respalde "material y moralmente" la sala de operaciones, que coordinará las acciones de los insurgentes contra los extremistas en las zonas de Al Raqa, Serin, Yarabulus y en Manbech, en el norte sirio.
Aparte de las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo, suscriben la nota la Brigada al Tauhid (Monoteísmo) Sector Oriental, la Brigada de los Revolucionarios de Al Raqa, el Ejército de la Venganza y la Brigada de la Yihad por el bien de Alá, entre otros.
Por otro lado, el EI ha puesto en marcha patrullas en la que ha bautizado como provincia del Éufrates, que abarca áreas en Irak y Siria, después de una serie de ataques recientes contra algunos de sus militantes por parte de grupos armados desconocidos.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos precisó que las patrullas, que están apoyadas por vehículos, se han desplegado en distintos puntos de la "provincia".
En agosto pasado, EI anunció la creación de una nueva división administrativa que bautizó con el nombre de "provincia del Éufrates", que incluye la población fronteriza siria de Al Bukamal y la iraquí de Al Qaem, además de zonas de sus alrededores, en una violación de los límites entre ambos países.
EI proclamó a finales de junio un califato en Irak y Siria, donde se ha hecho con amplias partes del territorio. El presidente de EEUU, Barack Obama, tiene previsto dar hoy un discurso a la nación para explicar un plan detallado para afrontar la "amenaza" del EI, destinado a debilitar a la milicia yihadista y "finalmente" derrotarla.