Al menos seis personas murieron y más de 200 debieron ser hospitalizadas después que el martes, sobre las 9:30 p.m., un tren con 243 personas a bordo, que iba de Washington a Nueva York, se descarriló en un vecindario del norte de Filadelfia.
Un saldo preliminar precisaba que seis de los heridos estaban en condición crítica. Mientras la noche avanzaba, los bomberos continuaban trabajando en el caótico escenario del accidente. Los socorristas han tenido que usar herramientas hidráulicas para retirar a los pasajeros de los vagones.
"Es absolutamente desastroso. Nunca he visto nada igual en mi vida, y la mayoría de la gente de aquí le dirá lo mismo", dijo el alcalde de Filadelfia, Michael Nutter, detallando que los siete carros, incluyendo la locomotora, sufrieron graves destrozos, y algunos quedaron sobre el techo.
Además, indicó que el número de muertos podría aumentar en las próximas horas.
El tren 188 de la compañía Amtrak había salido de Washignton a las 19H10 locales (23H10 GMT) y tenía previsto llegar a Nueva York a las 22H34 locales. El accidente tuvo lugar hacia las 21:30 p.m., en el vecindario Port Richmond del norte de Filadelfia, situado a orillas del río Delaware.
El excongresista estadounidense Patrick Murphy, de Pensilvania, viajaba en el tren. "Estoy bien. Ayudando a otros. Oren por los heridos", tuiteó.
Murphy, que se encontraba en el vagón cafetería, dijo que el tren parecía ir a unas 60-70 millas por hora (97-113 km/h) cuando se descarriló y volcó. Algunos heridos, con las manos y el rostro ensangrentado, no lograban moverse, dijo Murphy, que publicó en Twitter imágenes del rescate.
Otro pasajero, Jeremy Wladis, de 51 años, estaba en el vagón de cola cuando se produjo el accidente. "Teléfonos, ordenadores, todo volaba. Había mujeres que fueron proyectadas hacia la rejilla para los equipajes", explicó al Philadelphia Inquirer. En los trenes de Amtrak no hay cinturones de seguridad.
Las imágenes en las redes sociales y la televisión mostraron pasajeros aturdidos, con heridas leves. Al menos uno de los vagones quedó apoyado sobre el techo, y tres, sobre un costado. Desde el aire, las imágenes transmitidas por diferentes cadenas de televisión mostraban al menos un vagón que quedó perpendicular a la vía.
En medio de la oscuridad, los socorristas usaban linternas para buscar heridos o sobrevivientes en la zona, ayudados por helicópteros con potentes reflectores. Mientras los bomberos traían escaleras para acceder a los vagones retorcidos, se veía un enjambre de ambulancias y patrulleros de policía, en un escenario caótico. Los bomberos pidieron a los helicópteros de la televisión y de la policía que sobrevuelan el área que ayudaran a iluminarla para facilitar las tareas de auxilio.
La compañía Amtrak confirmó en Twitter que había "heridos" entre los viajeros, sin precisar una cifra, y añadió que todos los servicios previstos entre Washington y Nueva York fueron suspendidos para facilitar las tareas de rescate. Se trata de uno de los corredores de ferrocarril más utilizados en Estados Unidos. Amtrak, la compañía de ferrocarriles que conecta a unas 500 poblaciones y ciudades en Estados Unidos y Canadá, señaló que la ruta afectada es la 188.
El servicio de investigación de accidentes de la Agencia Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) señaló que sus agentes ya se encuentran en el lugar.
