“Nuestra tercera responsabilidad con las futuras generaciones es dejarles una América que esté libre de peligro y protegida por la paz. Nosotros legaremos a nuestros hijos todas las libertades que ahora disfrutamos y la primordial entre ellas es estar libre del miedo”, dijo el Presidente.
Manifestó que Estados Unidos de América, colaborando con aliados y amigos, también se ha enfrentado al enemigo en el exterior con determinación, éxito y continuidad después de los ataques del terrorismo internacional el 11 de septiembre del 2001 en Nueva York y Chicago. “La red terrorista Al-Kaeda que atacó a nuestro país”, dijo Bush, “todavía tiene líderes, pero muchos de sus principales comandantes han sido eliminados. Todavía hay regímenes que buscan armas de destrucción masiva, pero ya no lo hacen sin despertar atención y sin consecuencias. Nuestro país todavía es el objetivo de terroristas que quieren matar a muchos e intimidarnos a todos y nosotros nos mantendremos a la ofensiva contra ellos hasta alcanzar la victoria”.
Bush dijo también que “perseguir a nuestros enemigos es el vital objetivo de la guerra al terrorismo y agradezco al Congreso que haya proporcionado a los hombres y mujeres de nuestras fuerzas armadas los recursos que necesitan. En tiempos de guerra tenemos que continuar apoyando a nuestros militares y darles los instrumentos de la victoria”.
Bush manifestó anoche en su discurso del Estado de la Nación (Unión) que otras naciones del mundo entero “han estado a nuestro lado” y mencionó a Afganistán e Iraq. Subrayó que Naciones Unidas y la Unión Europea han proporcionado asistencia técnica para la celebración de elecciones en esos dos países y que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) está conduciendo una misión para ayudar a entrenar a la oficialidad militar iraquí. Estamos cooperando con 60 gobiernos en la “Iniciativa para la Proliferación de la Seguridad”, expresó, “para descubrir y poner fin al tránsito de materiales peligrosos”.