El influyente senador republicano por Florida Marco Rubio dijo que la llamada Ley de Ajuste cubano, que lleva 47 años en vigor, debe ser revisada, informó el diario floridano Tampa Bay Times.
Durante una reunión esta semana con miembros de la Sociedad de Editores de Noticias de EE.UU., el senador señaló que tiene problemas con la forma en que los cubanos abusan de la legislación, dijo el periódico.
La ley, que concede a los cubanos el privilegio de obtener la residencia permanente de EE.UU. al año y un día de estar en el país, sin embargo no es un tema abordado en el proyecto de reforma inmigratoria elaborado por el Senado y que Rubio fue uno de los que ayudó a redactar.
“No critico a nadie que quiera visitar a su mamá o su papá o a un hermano o hermana que se está muriendo—dijo el senador—.Pero les digo, es muy difícil justificar que el estatus de alguien es el de refugiado o exiliado cuando al año y medio después de haber llegado (a EE.UU.) está volando de regreso (a Cuba) una y otra vez”.
El Tampa Bay pone de relieve que más de un millón de cubanos han recibido la residencia estadounidense desde que la Ley de Ajuste entró en vigor en 1966, “pero en años recientes—precisa— ha estado bajo creciente escrutinio en cuanto a que si los cubanos abandonan (su país) por razones económicas más que políticas”.
Según el diario, Rubio no tiene ningún cambio específico de la ley en mente. “Es algo que necesito estudiar más cuidadosamente”, indicó.
Otros dos legisladores cubanoamericanos por Florida, los representantes Ileana Ros-Lehtinen y Mario Díaz-Balart, destaca el Tampa Bay, también se han pronunciado por cambios en la ley.
El periódico cita además a Jaime Suchlicki, director del Instituto para Estudios Cubanos y Cubanoamericanos de la Universidad de Miami, quien cree que el estatus especial otorgado a los inmigrantes de la isla debe terminar.
“Algunos tienen familiares (en Cuba) con quienes quisieran estar en contacto —apunta la publicación—, mientras que otros dicen que la ley elimina cualquier motivación a que la gente permanezca en Cuba y desafíe al gobierno”.
Durante una reunión esta semana con miembros de la Sociedad de Editores de Noticias de EE.UU., el senador señaló que tiene problemas con la forma en que los cubanos abusan de la legislación, dijo el periódico.
La ley, que concede a los cubanos el privilegio de obtener la residencia permanente de EE.UU. al año y un día de estar en el país, sin embargo no es un tema abordado en el proyecto de reforma inmigratoria elaborado por el Senado y que Rubio fue uno de los que ayudó a redactar.
“No critico a nadie que quiera visitar a su mamá o su papá o a un hermano o hermana que se está muriendo—dijo el senador—.Pero les digo, es muy difícil justificar que el estatus de alguien es el de refugiado o exiliado cuando al año y medio después de haber llegado (a EE.UU.) está volando de regreso (a Cuba) una y otra vez”.
El Tampa Bay pone de relieve que más de un millón de cubanos han recibido la residencia estadounidense desde que la Ley de Ajuste entró en vigor en 1966, “pero en años recientes—precisa— ha estado bajo creciente escrutinio en cuanto a que si los cubanos abandonan (su país) por razones económicas más que políticas”.
Según el diario, Rubio no tiene ningún cambio específico de la ley en mente. “Es algo que necesito estudiar más cuidadosamente”, indicó.
Otros dos legisladores cubanoamericanos por Florida, los representantes Ileana Ros-Lehtinen y Mario Díaz-Balart, destaca el Tampa Bay, también se han pronunciado por cambios en la ley.
El periódico cita además a Jaime Suchlicki, director del Instituto para Estudios Cubanos y Cubanoamericanos de la Universidad de Miami, quien cree que el estatus especial otorgado a los inmigrantes de la isla debe terminar.
“Algunos tienen familiares (en Cuba) con quienes quisieran estar en contacto —apunta la publicación—, mientras que otros dicen que la ley elimina cualquier motivación a que la gente permanezca en Cuba y desafíe al gobierno”.
