El Presidente de China, Hu Jintao, inauguró un foro empresarial de inversión y comercio en La Habana y dijo que las buenas relaciones políticas entre los dos países garantizan una cooperación económica creciente.
El régimen de Fidel Castro acordó terminar la construcción de la planta de ferro-níquel de Las Camariocas, que se calcula que podrá producir 68 mil toneladas anuales de ferroníquel con un contenido de níquel puro de 22 mil 500 toneladas.
Castro dijo que China es “la más prometedora esperanza y el mejor ejemplo” y además alegó que cada pueblo debe adoptar la estrategia concreta que requiera su propio país.
También se estudia en Cuba la construcción de una refinería de níquel y cobalto y una planta de tratamiento de los dos productos que son minerales estratégicos y que en el pasado despertó el interés inversionista de Estados Unidos, China y la ahora desaparecida Unión Soviética cuando esta potencia comunista existía y estaba en su apogeo.