Este gesto de cortesía política forma parte de la tradición democrática de esta nación, según la cual el Presidente en funciones se aparta de la atención pública mientras el partido opositor celebra su Convención Nacional para postular candidato a la presidencia.
El Partido Demócrata inauguró el 26 de julio su Convención en la ciudad de Boston, durante la cual los Senadores John Kerry y John Edwards serán proclamados el próximo jueves como candidatos a la presidencia y vice-presidencia del país para participar en las elecciones del próximo 2 de noviembre.
En agosto será el turno del candidato demócrata para que mantenga una cortés semana de bajo perfil, cuando el Partido Republicano celebre su Convención Nacional en la ciudad de Nueva York y en esa oportunidad, proclame a George W. Bush como candidato a su reelección como Presidente de Estados Unidos.
Las encuestas indican que el presidente Bush y el candidato opositor Kerry están prácticamente empatados en la preferencia de los votantes, pero como también es tradicional, se espera que el candidato demócrata mejore su posición en los sondeos de opinión a raíz de la gran publicidad que generará la Convención Nacional de su partido.
Después de la Convención Republicana se espera también un repunte de Bush en las encuestas entre los votantes, ante lo cual los analistas podrían tener una visión más clara del escenario electoral del próximo noviembre.