En una reunión con exiliados cubanos, el funcionario estadounidense explicó que la decisión sigue las políticas del presidente George W. Bush que prohíben las transacciones relacionadas con los viajes a Cuba.
Las empresas cuyas actividades serán prohibidas usan la Internet para promocionar y vender al público estadounidense viajes turísticos a la Isla.
El secretario del Tesoro dijo que esas compañías están localizadas en Cuba, Argentina, Chile, Canadá, Bahamas, Holanda y el Reino Unido.