“Veamos qué productos químicos había allí”, dijo Blix en la Universidad de Oxford, Gran Bretaña, después que un funcionario del gobierno de Iraq habló del descubrimiento de ese laboratorio en Faluya. “Muchas historias como ésta se evaporan cuando se miran más de cerca”, agregó Blix.
Insistió en que “si llegaran a encontrar algo, estaramos todos nosotros muy sorprendidos”.
El Ministro de Estado de Iraq, que está encargado de la seguridad nacional, Qassem Daoud, dijo que la Guardia Nacional de Iraq había hallado en una casa del barrio industrial de Faluya, “un laboratorio de materias químicas... para fabricar explosivos y venenos”. “Había manuales explicando cómo fabricar explosivos y sustancias tóxicas, incluido el ántrax”, dijo Daoub.
Blix, el ex diplomático sueco que estuvo encargado de buscar armas de destrucción masiva durante las 15 semanas anteriores a la invasión
de Iraq el año pasado y no las encontró, nunca ha disimulado su escepticismo acerca de la existencia de este tipo de armas en Iraq.