Berger juró como 58 presidente de Guatemala en sustitución de Alfonso Portillo, que deja un país empobrecido y con altos índices de delincuencia.
En sus primeras palabras como presidente, Berger sintetizó en una frase la idea que le guiará en los cuatros años que tiene por delante, al afirmar: "hoy dejamos atrás una etapa de frustración y desaliento".
Nacido en la capital guatemalteca el 11 de agosto de 1946, Berger es hijo de una familia de ganaderos, estudió en los mejores colegios, se graduó en una universidad privada, y está casado desde hace 36 años con Wendy Widman y el matrimonio tiene cinco hijos.
Berger, aseguró que gobernará por igual para todos los guatemaltecos, ofreció combatir la violencia y reducir durante su mandato los altos índices de delincuencia, especialmente las pandillas juveniles.