La Comisión Interamericana de Derechos Humanos exigió a Honduras el esclarecimiento del asesinato del periodista y activista de derechos de los homosexuales, Erik Martínez, cuyo cadáver fue hallado este lunes, dos días después de su desaparición, informa la agencia de noticias AFP.
En un comunicado, la organización advirtió sobre la necesidad de que el Estado hondureño esclarezca la causa del crimen y sancione a los perpetradores, pues ya suman 19 los periodistas asesinados desde el golpe de estado de junio de 2009.
La Comisión recordó que en el pasado pudieron constatar la profunda discriminación y situación de riesgo de la comunidad de lesbianas, gays, bisexuales y transgénero en Honduras, así como la violación de diversos derechos humanos desde el golpe.
A la ola de inseguridad que rodea al país, clasificado como el más violento de la región, se suma el secuestro del también periodista Alfredo Villatoro, de 47 años, interceptado por desconocidos en camino a la emisora donde trabajaba hacía ya dos décadas.
La Iglesia Católica y la Asociación de Medios de Comunicación del país centroamericano se unieron a los reclamos por la pronta intervención de las autoridades en el caso de Villatoro, incluso el expresidente Manuel Zelaya desde República Dominica condenó el secuestro.
La iglesia lamentó que no se tengan respuestas contundentes de los organismos responsables de llevar a cabo las investigaciones y “de evitar que la impunidad arrope y proteja a los actores materiales e intelectuales de los hechos.”
Por su parte, el presidente Porfirio lobo dijo que “la policía está trabajando fuerte (…) a la espera de mejores resultados,” cita AFP. Mientras que la agencia EFE indica que el único sospechosos detenido, Gerson Basilio Godoy, un exagente policial, fue liberado el jueves por falta de pruebas.
El Observatorio de la Violencia de Honduras tienen documentados en lo que va de año 16 casos de secuestros, que han trascendido a la prensa, pero la mayoría no son divulgados. Según estadísticas de las Naciones Unidas, en esta nación se registran al año más de 86 homicidios cada 100.000 habitantes.
El Colegio de Periodistas de Honduras, con unos 1.200 afiliados, solicitó a los captores el respeto a la integridad física del comunicador y su inmediata liberación, y recordó que en reiteradas ocasiones han solicitado a las autoridades, protección para los periodistas que por su actividad profesional, están expuestos a sufrir atentados criminales.
En un comunicado, la organización advirtió sobre la necesidad de que el Estado hondureño esclarezca la causa del crimen y sancione a los perpetradores, pues ya suman 19 los periodistas asesinados desde el golpe de estado de junio de 2009.
La Comisión recordó que en el pasado pudieron constatar la profunda discriminación y situación de riesgo de la comunidad de lesbianas, gays, bisexuales y transgénero en Honduras, así como la violación de diversos derechos humanos desde el golpe.
A la ola de inseguridad que rodea al país, clasificado como el más violento de la región, se suma el secuestro del también periodista Alfredo Villatoro, de 47 años, interceptado por desconocidos en camino a la emisora donde trabajaba hacía ya dos décadas.
La Iglesia Católica y la Asociación de Medios de Comunicación del país centroamericano se unieron a los reclamos por la pronta intervención de las autoridades en el caso de Villatoro, incluso el expresidente Manuel Zelaya desde República Dominica condenó el secuestro.
La iglesia lamentó que no se tengan respuestas contundentes de los organismos responsables de llevar a cabo las investigaciones y “de evitar que la impunidad arrope y proteja a los actores materiales e intelectuales de los hechos.”
Por su parte, el presidente Porfirio lobo dijo que “la policía está trabajando fuerte (…) a la espera de mejores resultados,” cita AFP. Mientras que la agencia EFE indica que el único sospechosos detenido, Gerson Basilio Godoy, un exagente policial, fue liberado el jueves por falta de pruebas.
El Observatorio de la Violencia de Honduras tienen documentados en lo que va de año 16 casos de secuestros, que han trascendido a la prensa, pero la mayoría no son divulgados. Según estadísticas de las Naciones Unidas, en esta nación se registran al año más de 86 homicidios cada 100.000 habitantes.
El Colegio de Periodistas de Honduras, con unos 1.200 afiliados, solicitó a los captores el respeto a la integridad física del comunicador y su inmediata liberación, y recordó que en reiteradas ocasiones han solicitado a las autoridades, protección para los periodistas que por su actividad profesional, están expuestos a sufrir atentados criminales.