Aunque los observadores internacionales ya han avalado el triunfo del presidente Hugo Chávez, la administración estadounidense considera que se han suscitado ciertas preocupaciones que deben ser atendidas, explicó un portavoz del Departamento de Estado.
Esas preocupaciones se refieren a las acusaciones de fraude por parte de la oposición a Chávez, indicó.
Sobre lo que ya no tiene ninguna duda Washington es sobre el comportamiento ejemplar del pueblo venezolano, al que felicitó porque demostró claramente su fuerte compromiso con la democracia.