En entrevista con la agencia de noticias Prensa Asociada, AP, el legislador uruguayo agregó que es una acusación típica de regímenes autoritarios contra quienes reclaman libertad y apoyo a los derechos humanos.
Trobo explicó que él forma parte de una red informal de legisladores de América Latina para dar su apoyo a los cubanos opositores que piden respeto a los derechos humanos.
La reacción se produjo ante una información publicada el jueves
por el diario izquierdista La República, en entrevista al diputado cubano Lázaro Barredo, quien acusó a Trobo de utilizar el Parlamento Latinoamericano sin autorización de dicho organismo para convertir una reunión del PARLATINO en un show propagandístico contra su país.
Uruguay y Cuba rompieron relaciones diplomáticas en abril de
2002 después que el presidente Jorge Batlle y Fidel Castro
intercambiaron ataques por la moción uruguaya en la Comisión
Internacional de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en Ginebra.