La policía desalojó el sábado de forma fulminante la céntrica plaza de Taksim en Estambul y el adyacente parque Gezi con cañones de agua, gases lacrimógenos y cargas policiales, según constató EFE.
Los antidisturbios lanzaron salvas de gas lacrimógenos y varias cargas que hicieron huir a los acampados, y han comenzado ya a desmontar las tiendas del parque, símbolo de las mayores revueltas antigubernamentales en el país en la última década.
Los policías se emplearon sin contemplaciones y utilizaron también pulverizadores a presión de gas pimienta de forma indiscriminada contra los acampados, entre ellos familias completos y la prensa internacional que cubría el desalojo.
Los antidisturbios lanzaron salvas de gas lacrimógenos y varias cargas que hicieron huir a los acampados, y han comenzado ya a desmontar las tiendas del parque, símbolo de las mayores revueltas antigubernamentales en el país en la última década.
Los policías se emplearon sin contemplaciones y utilizaron también pulverizadores a presión de gas pimienta de forma indiscriminada contra los acampados, entre ellos familias completos y la prensa internacional que cubría el desalojo.