Brahimi se disculpa con pueblo sirio por ineficaces negociaciones de paz

  • Agencias

El mediador del proceso de paz para Siria, Lajdar Brahimi

Se acuerda tercera ronda de negociaciones sin fecha por ahora.
El mediador internacional Lakhdar Brahimi se disculpó el sábado con el pueblo sirio por la falta de avances en las conversaciones de paz de Ginebra, luego de que la segunda ronda terminara con apenas algo más que un acuerdo para reunirse de nuevo.

El diplomático argelino dijo que el pacto para evacuar civiles de la asediada ciudad de Homs generó esperanzas que no fueron satisfechas en las conversaciones de Ginebra, en las que participaron grupos de oposición y representantes del presidente Bashar al-Assad.

El jefe del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) también destacó los magros resultados hasta el momento y dijo que la evacuación de Homs no traía mejoras en el acceso humanitario en Siria, donde Naciones Unidas dice que unas 3 millones de personas necesitadas de ayuda están fuera de su alcance.

"Lo lamento muchísimo y me disculpo con el pueblo sirio porque tenían grandes esperanzas en esto, de que algo ocurriría acá", dijo Brahimi a periodistas tras las conversaciones.

"Creo que lo poco que se ha logrado en Homs les dio incluso más esperanzas de que quizás éste es el inicio de una salida de esta horrible crisis en la que están", agregó.

Brahimi dijo que la última sesión de la segunda ronda de conversaciones en Ginebra fue "tan ardua como todas las reuniones que hemos tenido, pero hemos acordado una agenda para cuando tenga lugar la siguiente ronda".

140 mil muertos en 3 años de conflicto

En el conflicto sirio de tres años han muerto más de 140,000 personas -incluyendo a más de 7,000 niños- según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, y está desestabilizando a sus países vecinos.

El Observatorio, un grupo de monitorización pro-oposición radicado en Londres, dijo que alrededor de 6,000 sirios han muerto desde el inicio de las más recientes conversaciones el mes pasado, la tasa de muertes más veloz desde que se inició el conflicto en Siria en el 2011.

Los rebeldes mayoritariamente suníes reciben el apoyo de grupos radicales suníes como Al Qaeda y otros extremistas extranjeros.

Irán, controlado por musulmanes chiíes, y el movimiento chií libanés Hezbollah han dado su apoyo al presidente Basharal-Assad, que pertenece a la secta siria alauí, derivada del Islam chií, y cuya familia ha dominado Siria por 44 años.