Presa política cubana denuncia crueldad de carceleros por negarse a trabajo forzado

Aimara Nieto Muñoz junto a su esposo, el opositor Ismael Boris Reñí. (Foto cortesía de CubaNet)

Por negarse a realizar trabajo forzado, la presa política Aimara Nieto Muñoz acaba de pasar 15 días en celda de castigo, en la cárcel mixta de mujeres conocida por "Betica", en la provincia de Las Tunas, a cientos de kilómetros de su hogar.

Este miércoles Nieto Muñoz pudo comunicarse vía telefónica con su esposo, el opositor Ismael Boris Reñí, quien dijo a Radio Martí que desde hace tres meses no puede enviar a la activista artículos de aseo, alimentos y medicinas.

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Su esposo, Ismael Boris Reñí, explicó la situación a Radio Martí

"La familia estaba preocupada. Estábamos esperando una llamada desde el día 8, que era el Día de la Mujer, y tampoco llamó. Ayer llamó, hablé personalmente yo con ella, y me explicó que desde el día 2 de este mismo mes la metieron en la celda", explicó el esposo.

Reñí subraya que se trata de una "celda de tortura, celda de castigo", un método que los carceleros usan frecuentemente, no solo con los presos políticos, sino también con los reos comunes.

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"Estuvo 15 días en la celda. La llevan a celda de tortura, por obligarla a hacer trabajo forzado, el día 2 de marzo, y la sacan el día 17. Forzarla a ella a que trabaje obligado, cuando está cumpliendo una sanción injustamente", denunció el opositor.

Entre las labores a las que son sometidas las presas, Reñí mencionó que "las ponen a guataquear, las ponen a chapear, las ponen a cargar sacos también, porque lo he visto cuando he ido allí". De no cumplir con el trabajo u otro reglamento del lugar, "la meten en celda", señaló.

"Me dijo que presentara una reclamación en Atención a Reclusos, en la Dirección de Cárceles y Prisones, en 15 y K", en el Vedado, La Habana, añadió el esposo de Nieto Muñoz.

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La presa política tiene problemas de salud, sufre de dolores en la cervical y la columna. "No le podemos pasar ningún tipo de medicamento, ni aseo personal, que le hace falta, desde hace tres meses ya", apuntó Reñí.

Nieto Muñoz fue trasladada en marzo de 2020 a Las Tunas, hace ya un año, desde la cárcel del Guatao, en La Habana. La medida fue denunciada como un castigo adicional a la condena de cuatro años de prisión que le fue impuesta en 2018.

La miembro de las Damas de Blanco y la Unión Patriótica de Cuba fue acusada de los supuestos delitos de atentado, daño y desacato. Activistas y familiares sostienen que Nieto Muñoz es inocente, y su sentencia injusta.

Aunque la presentará, el opositor cree que la reclamación "no va a tener efecto ninguno, porque sabemos el modo de trabajar de esta dictadura".

Según dijo, toda esa presión a los presos políticos, incluida su esposa, es “para que claudiquen”.

(Con reporte de Ivette Pacheco para Radio Martí)