Otero Alcántara rapado y encerrado con presos comunes; pregunta por El Osorbo, Esteban y los detenidos en las manifestaciones (VIDEO)

Una foto de Archivo de Otero Alcántara con la cabeza rapada.

Rapado y entre presos comunes permanece el artista Luis Manuel Otero Alcántara, líder del Movimiento San Isidro, encarcelado en la prisión de Guanajay, en la provincia Artemisa, declaró su novia la curadora de arte Claudia Genlui a Radio Martí.

El renombrado activista, fue arrestado durante las manifestaciones de descontento popular el 11 de julio, en La Habana cuando hizo un llamado a sumarse al levantamiento nacional por el fin del régimen comunista.

"Toda Cuba está en la pista. Me voy para el Malecón, cuésteme lo que cueste (...) Ya está bueno de dictadura", aseguró en una directa en Facebook en la que pidió a la Unión Patriótica de Cuba y otras organizaciones opositoras que convocaran a los cubanos a unirse a la protesta.

Genlui se comunicó esta semana con el activista pero aclara que no pudieron hablar mucho: "El martes me dijo que estaba bien dentro de lo que cabe, que ya lo habían rapado, que lo estaban tratando como un peso normal, que estaba con el resto de los presos, o sea que no estaba en aislamiento. Me preguntó por Maykel (El Osorbo), me preguntó por Esteban (Rodríguez), me preguntó y por quién más estaba detenido y cómo estaban las cosas afuera".

Your browser doesn’t support HTML5

Claudia Genlui se comunica con Otero Alcántara


La también activista del Movimiento San Isidro, fundado por Otero Alcántara, explicó que todavía están tramitando que le den al abogado defensor el permiso de ir a Guanajay, pues como es otra provincia, hay que pedir permiso por las restricciones de movilidad impuestas para controlar la propagación del COVID-19.

Lee también Miles de cubanos se lanzan a la calle en varias ciudades del país al grito de ¡Libertad! "¡Queremos un cambio! ¡No tenemos miedo!" (VIDEOS)

"A la familia no le han dicho que día es el juicio, solamente sabemos que está siendo procesado por el expediente 24 que incluye el desacato que es el mismo que Maykel y que está en investigación por los hechos del 11 de julio, pero como tal no nos han dicho si va a haber juicio, si no lo van a hacer, ni cuánto tiempo va a estar ahí", dijo la curadora de Arte.

El escritor y periodista cubano Carlos Manuel Álvarez habló de la importancia de los artistas encarcelados Otero Alcántara, Maykel Osorbo y Hamlet Lavastida para el actual movimiento a favor de la democracia en Cuba, que estalló masivamente en la isla y despertó a los cubanos residentes en muchas regiones del mundo.

"Todo el mundo reclama, lógicamente, la liberación de sus presos o conocidos. Hay hasta menores de edad en la cárcel, y mucha vaguedad, mucho aún por saber. Nunca como en no sé cuánto hay tanta gente reclamando a la misma vez. Mis tres amigos son estos: Maykel, Hamlet y Luis. Todo el mundo los conoce, pero estamos en un momento en el que, extrañamente, el hecho de que sean conocidos no es algo que juegue a su favor. ¿Por qué? Porque vienen viviendo onces de julio desde mucho antes del 11 de julio, y directa e indirectamente le han estado diciendo a la gente cómo se hacía. Propicias un momento, pero no puedes vivirlo. Es el precio que hay que pagar por adelantarse. De la misma manera, la mediatización de ese hecho te sepulta. Eres víctima de tu propio éxito. Entre tanto revuelo se diluyen los rostros justos que nos trajeron hasta este revuelo. Más que la gente que dice que va a hacer todo lo posible por sacar a los detenidos de las cárceles, estos cuerpos sacrificiales son los que sostienen, con su encierro, que saquen a muchos otros. Aún desde el calabozo hacen por la liberación de los demás. Cuando cualquier figura pública dice que liberen a los manifestantes pacíficos y a los vándalos no, estos amigos son justamente esos cuerpos vándalos que van a sostener la buena conciencia de la gente parcialmente domesticada. Es el tiempo de la desobediencia, es el tiempo de la práctica política de la insubordinación. Estos tres amigos cargan con la merecida virtud de que, cuando se pide la liberación de ellos, se pide inmediatamente las de los demás, porque ellos son el corazón del estigma, el mercurio líquido que hay que mantener tras las rejas. No son líderes, son individuos. Les debemos mucho, creo yo. No podemos darnos el lujo de no pagarles", escribe Álvarez.

[Entrevista a Claudia Genlui realizada por Ivette Pacheco para Radio Martí]