La oposición venezolana condenó el lunes la decisión del gobierno de cerrar el consulado de Miami, tras la expulsión de Estados Unidos de la jefa de esa oficina y tachó la medida de "discriminatoria" porque va contra los derechos de los venezolanos residentes en ese país.
El cierre del consulado de Miami, oficializado este lunes por el gobierno venezolano, es "una medida discriminatoria y caprichosa" que afecta "a los 200.000 venezolanos que habitan en esas zonas" de Estados Unidos, dijo el secretario ejecutivo de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Ramón Guillermo Aveledo.
"Con esta decisión se verá afectado el menor (de edad) que no podrá tramitar autorización de viajar, y el ciudadano que no podrá obtener un nuevo pasaporte cuando el anterior expire o se extravíe", criticó Aveledo, según un comunicado colocado en la página web de la MUD.
Además, la decisión "coarta el derecho a elegir de los venezolanos que ahí residen, al no permitir las inscripciones en el Registro Electoral en esa circunscripción consular" y "viola otros derechos ciudadanos", por lo que se trata de una "medida de retaliación política", consideró.
En una nota oficial, el gGbierno ordenó el lunes el regreso a Caracas del personal consular venezolano destacado en Miami ante las "amenazas" que les "hacen correr un peligro real, grave e inminente", luego de que Estados Unidos expulsara a la responsable de esa oficina
La agencia AFP dijo que el consulado de Miami es el principal centro de votación venezolano en el extranjero y en octubre de este año se realizarán en el país unas elecciones presidenciales a las que la oposición acudirá con un candidato único para buscar vencer al presidente Hugo Chávez, que optará por un tercer periodo de gobierno.
Ya el viernes, Chávez anunció el "cierre administrativo" del consulado en Miami mientras su gobierno estudiaba la expulsión de la cónsul Livia Acosta por parte de Washington, que la declaró persona non grata hace poco más de una semana y le dio hasta el pasado martes para abandonar el país.
Aunque Washington no justificó su expulsión, la funcionaria venezolana había sido señalada en diciembre en un documental de la cadena hispana Univisión como participante en un supuesto complot iraní para realizar ciberataques en contra de Estados Unidos, orquestado en México años atrás cuando la diplomática estaba destacada en ese país.
Estados Unidos y Venezuela mantienen tensas relaciones diplomáticas y carecen de embajadores desde 2010.