Moscú mantiene intensos bombardeos; EEUU aprueba ayuda billonaria y la UE más sanciones

Ucranianos tratando de subir a un tren que los lleve desde Kyiv a Lviv.

Moscú dice que abrió corredores humanitarios el 9 de marzo por segundo día para las personas que huyen de Kyiv y otras cuatro ciudades, cuando el número de refugiados por la invasión rusa superó ya los 2 millones ante los persistentes bombardeos de algunas áreas civiles.

La viceprimera ministra ucraniana, Iryna Vereshchuk, aseguró que Kyiv intentará evacuar a los civiles a través de seis corredores humanitarios, incluido Mariupol.

El jefe del Centro de Control de la Defensa Nacional de Rusia, Mikhail Mizintsev, citado por la agencia de noticias TASS, dijo que a partir de las 9 am del 9 de marzo garantizarían el paso seguro de los civiles que deseen salir de Kyiv, Chernihiv, Sumy, Kharkiv y el puerto sitiado de Mariupol en el Mar Negro.

Una niña sentada en un improvisado refugio antibombas en Mariúpol, Ucrania, el lunes 7 de marzo de 2022.

En un discurso televisado el 9 de marzo, el presidente Volodymyr Zelenskiy dijo que, a menos que se declare una zona de exclusión aérea para proteger a Ucrania, la comunidad internacional sería responsable de una catástrofe humanitaria masiva.

“Rusia usa misiles, aviones y helicópteros contra nosotros, contra los civiles, contra nuestras ciudades, contra nuestra infraestructura. Es el deber humanitario del mundo responder”, dijo.

Volvió a pedir apoyo aéreo internacional, diciendo “envíennos aviones”. Las potencias occidentales han mandado equipos militares y reforzaron las fuerzas en el flanco oriental del país, pero han sido cautas a la hora de proporcionar respaldo aéreo por la posibilidad de entrar en una guerra directa con Moscú.

En un inusual llamado en ruso, Zelenskyy pidió a los soldados rusos que se vayan del país.

“Nuestra resistencia durante casi dos semanas les ha demostrado que no nos rendiremos, porque este es nuestro hogar. Son nuestras familias e hijos. Lucharemos hasta que podamos recuperar nuestra tierra", señaló. “Todavía pueden salvarse marchándose a casa".

Un soldado ucraniano pasa junto a una pieza de la cola de un bombardero Su-34 ruso sobre un edificio dañado en Járkiv, Ucrania, el 8 de marzo de 2022.

El Ministerio de Defensa del Reino Unido dijo en una actualización publicada en redes sociales el miércoles que los “combates en el norte y oeste de Kiev siguen activos y las fuerzas rusas no logran ningún avance significativo”.

Las ciudades de Járkiv, Chernígov, Sumy y Mariúpol siguen rodeadas por las fuerzas rusas y están siendo objeto de intensos bombardeos, agregó.

Las defensas aéreas ucranianas estaban aguantando frente a la aviación rusa “evitando probablemente que consigan algún tipo de control del aire”, apuntó el ministerio.

La OTAN ha descartado una zona de exclusión aérea por temor a que una confrontación directa con Rusia pueda desencadenar una guerra mundial.

Mientras que en Estados Unidos, los líderes del Congreso llegaron a un acuerdo bipartidista para proporcionar 13.600 millones de dólares para ayudar a Ucrania a defenderse de la invasión de Rusia y ayudar a los aliados europeos a hacer frente a la peor crisis de refugiados del continente desde la Segunda Guerra Mundial.

La Unión Europea informó el miércoles que ha acordado una nueva ronda de sanciones dirigidas a funcionarios de alto rango y oligarcas rusos en represalia por la invasión a Ucrania por parte de Moscú.

Las nuevas sanciones también incluirán restricciones al sector marítimo y excluirán a tres bancos bielorrusos del sistema bancario SWIFT.

Desde que Rusia invadió Ucrania el 24 de febrero, el número de refugiados ha alcanzado probablemente entre 2,1 y 2,2 millones, dijo el director de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Filippo Grandi. La mayoría son mujeres y niños, ya que los hombres se quedan en el país para luchar.

Hasta ahora, la mayoría de los refugiados han acudido a familiares, amigos o contactos en la diáspora ucraniana en lugar de a los centros de acogida que están creando las autoridades, dijo Grandi.

Moscú califica su acción de "operación militar especial" para desarmar a su vecino y desalojar a los dirigentes que llama "neonazis". Kiev y sus aliados occidentales lo rechazan como un pretexto sin fundamento para una guerra no provocada contra un país democrático de 44 millones de habitantes.