Manifestante del 11J en Güines Maikel Puig Bergolla condenado a otros dos años de prisión: "No les bastaron los 20"

Imagen de campaña por liberación de Maikel Puig Bergolla. (Foto: Facebook)

Un grupo de jueces del Tribunal Supremo celebró la semana pasada el juicio de casación a ocho de los manifestantes del 11 de julio en Güines, Mayabeque.

La vista tuvo lugar en la ciudad cabecera provincial San José de las Lajas.

“Les hicieron la casación, cuyos resultados los darán en 30 días”, indicó Saily Núñez, esposa de Maikel Puig Bergolla, quien carga la sentencia más alta, 20 años de privación de libertad.

“En el juicio, más circo, igual al primero. A pesar de que los abogados hacen una buena defensa, las mentiras del fiscal no son rebatibles. Al final, son culpables de todas maneras”, lamentó.

Según la Fiscalía, durante las manifestaciones populares en su localidad, Puig Bergolla y otros ciudadanos embistieron a un carro patrullero con gritos de "maten a la Policía" y lanzaron piedras al vehículo, una de las cuales rompió una baliza valorada en 37 pesos.

En la petición del órgano acusatorio se asegura que Puig Bergolla y Yanier Santana Díaz “intentaron privar de la vida a dos agentes de la autoridad”.

Como testigos del incidente en cuestión se presentaron los dos policías que supuestamente fueron las víctimas, refiere Núñez.

La defensa de Puig Bergolla alegó que él no estaba en el lugar de los hechos, no obstante, resultó convicto.

Otros siete manifestantes se presentaron a la apelación: Noslen Roque Cordero, condenado a 18 años de prisión; Mariurka Díaz Calvo, a 15 años; Noel Martínez Tápanes, a 6 años; Yanier Santana Díaz, 12 años; Dunieski Ruiz Cañizares, 5 años; Luis Miguel Valls Pérez, 5 años y Yeriel Cruz Pérez, 10 años. Todos por instigación a delinquir, asesinato en grado de tentativa, desórdenes públicos y desacato.

“Ese mismo día, al salir de la casación, a Maykel le hicieron el otro juicio, que fue sumario”, continuó Núñez.

"Le pusieron un delito de atentado contra el jefe de la prisión de Quivicán, donde él se encontraba anteriormente, en octubre, cuando lo trasladaron para la celda de aislamiento, en la que estuvo tres meses, y ocho días que fueron interminables. Cuando lo trasladaban de celda, Maykel, preguntó por qué y no le contestaron. Entonces el gritó a otros reos que me llamaran a mí para que yo fuera a casa del Jefe de la prisión, o a la prisión, a averiguar por qué lo estaban trasladando, si él no había cometido indisciplinas”.

“El Jefe de la Prisión de Quivicán montó un teatro diciendo que Maykel lo había amenazado con mandar a 100 personas a tirarle piedras a su vivienda, y que él temía por su vida y y sus familiares”.

“En la vista quedó más que demostrado que Maykel era inocente porque no fue, ni siquiera, con el jefe de la prisión. El jefe nunca estuvo presente. Dijo que lo habían trasladado dos guardias, lo que fue mentira, pues lo condujo un solo guardia, que en sus declaraciones se contradijo”.

“Le echaron dos años más por el delito de atentado. No les bastaron los 20. Ahora son 22, denunció la indignada mujer.

Actualmente, Puig Bergolla está recluido en la cárcel de Agüica, en Matanzas, a 158 kilómetros de su hogar.