Las pistas de un asesinato presuntamente cometido por un diplomático de la embajada de Venezuela en Kenia han llevado a la policía de ese país africano a abrir una nueva pesquisa por narcotráfico.
Todo comenzó con el arresto del primer secretario de la embajada de Venezuela en Nairobi, Dwight Sagaray, tras el asesinato de la encargada de negocios venezolana en ese país, Olga Fonseca, hallada muerta en su residencia en la capital de Kenia el pasado 27 de julio.
Pero la investigación por el asesinato ha abierto nuevas sospechas vinculadas con tráfico de drogas, y las autoridades keniatas han pedido la cooperación de INTERPOL tras emitir una orden de captura contra un amigo de Sagaray, el médico Mohamed Ahmed Mohamed Hassan, con quien compartía vivienda y además utilizaba, según fuentes, un vehículo de la embajada.
Los diarios The Star y The Kenyan Daily Post, de Nairobi, dicen que agentes de seguridad recibieron informes según los cuales uno o varios funcionarios de la misión venezolana se valieron de la inmunidad de la valija diplomática para traficar narcóticos.
Ambos periódicos destacan que la encargada de negocios, que recién había asumido su cargo el pasado 15 de julio, tan pronto como llegó suspendió la entrada de valijas diplomáticas a la nación africana, lo que presuntamente habría generado fricciones en la embajada y podría haber sido el móvil para asesinarla.
Fuentes dijeron al diario The Star que la policía de Kenia logró establecer un nexo entre diplomáticos de la embajada venezolana y narcotraficantes locales e internacionales, y que las investigaciones se han llevado a cabo tratando de evitar roces diplomáticos con el gobierno de Venezuela.
De acuerdo con la acusación de la fiscalía los dos sospechosos estrangularon a la diplomática la noche del 26 al 27 de julio, y habría además otras personas, no identificadas, involucradas en el crimen.
Las audiencias para enjuiciar a Sagaray, quien se ha declarado inocente, tienen previsto comenzar el 27 de agosto. El gobierno venezolano le retiró la inmunidad diplomática para que pudiera ser procesado.
Pero la investigación por el asesinato ha abierto nuevas sospechas vinculadas con tráfico de drogas, y las autoridades keniatas han pedido la cooperación de INTERPOL tras emitir una orden de captura contra un amigo de Sagaray, el médico Mohamed Ahmed Mohamed Hassan, con quien compartía vivienda y además utilizaba, según fuentes, un vehículo de la embajada.
Los diarios The Star y The Kenyan Daily Post, de Nairobi, dicen que agentes de seguridad recibieron informes según los cuales uno o varios funcionarios de la misión venezolana se valieron de la inmunidad de la valija diplomática para traficar narcóticos.
Ambos periódicos destacan que la encargada de negocios, que recién había asumido su cargo el pasado 15 de julio, tan pronto como llegó suspendió la entrada de valijas diplomáticas a la nación africana, lo que presuntamente habría generado fricciones en la embajada y podría haber sido el móvil para asesinarla.
Fuentes dijeron al diario The Star que la policía de Kenia logró establecer un nexo entre diplomáticos de la embajada venezolana y narcotraficantes locales e internacionales, y que las investigaciones se han llevado a cabo tratando de evitar roces diplomáticos con el gobierno de Venezuela.
De acuerdo con la acusación de la fiscalía los dos sospechosos estrangularon a la diplomática la noche del 26 al 27 de julio, y habría además otras personas, no identificadas, involucradas en el crimen.
Las audiencias para enjuiciar a Sagaray, quien se ha declarado inocente, tienen previsto comenzar el 27 de agosto. El gobierno venezolano le retiró la inmunidad diplomática para que pudiera ser procesado.