José Fernández, de 20 años de edad, se convertirá en el pitcher más joven en subir al montículo por los Marlins
El diestro cubano José Fernández (20 años) se convertirá el domingo, en Nueva York, en el jugador más joven en la historia de los Marlins en iniciar un juego de béisbol en las Grandes Ligas. También será el cuarto pelotero más joven en debutar en la franquicia.
El diario Sun-Sentinel afirma que los Marlins sorprendieron a todo el mundo cuando decidieron promover a su joven prospecto de 6 pies - 3 pulgadas y 240 libras de peso.
"Técnicamente está listo para lanzar, en este momento, en las Grandes Ligas", dijo Orlando Chinea, encargado de vigilar el desarrollo profesional de Fernández, quien según los expertos debe convertirse en una estrella del montículo en los próximos años.
"Hemos trabajado en la parte psicológica del juego, para no dejar que sus emociones salgan a la superficie (…) Él, es un lanzador de sangre fría, porque yo lo he enseñado a no reaccionar, sino a pensar", indicó Chinea. Fernández escapó de Cuba en 2008.
"Le dije a (Fernández) claramente que si él era capaz de salir de Cuba con su madre, a bordo de un barco y arriesgar su vida, que no podía tener miedo o sentir cualquier tipo de presión o tener un pensamiento negativo cuando él estaba en el montículo ", dijo Chinea.
El padre de Fernández, Ramón Jiménez, huyó de Cuba en 2005 y se estableció en Tampa, Florida. Él, sabía que Chinea estaba en la zona y cuando su hijo llegó a Estados Unidos, fue a buscarlo para presentárselo al entrenador, quien anteriormente había trabajado con lanzadores del calibre de Rolando Arrojo, José Contreras, Orlando "El Duque" Hernández y Liván Hernández. En la década de 1990, Chinea fue entrenador de los Yomiuri Giants, en Japón.
El diario Sun-Sentinel afirma que los Marlins sorprendieron a todo el mundo cuando decidieron promover a su joven prospecto de 6 pies - 3 pulgadas y 240 libras de peso.
"Técnicamente está listo para lanzar, en este momento, en las Grandes Ligas", dijo Orlando Chinea, encargado de vigilar el desarrollo profesional de Fernández, quien según los expertos debe convertirse en una estrella del montículo en los próximos años.
"Hemos trabajado en la parte psicológica del juego, para no dejar que sus emociones salgan a la superficie (…) Él, es un lanzador de sangre fría, porque yo lo he enseñado a no reaccionar, sino a pensar", indicó Chinea. Fernández escapó de Cuba en 2008.
"Le dije a (Fernández) claramente que si él era capaz de salir de Cuba con su madre, a bordo de un barco y arriesgar su vida, que no podía tener miedo o sentir cualquier tipo de presión o tener un pensamiento negativo cuando él estaba en el montículo ", dijo Chinea.
El padre de Fernández, Ramón Jiménez, huyó de Cuba en 2005 y se estableció en Tampa, Florida. Él, sabía que Chinea estaba en la zona y cuando su hijo llegó a Estados Unidos, fue a buscarlo para presentárselo al entrenador, quien anteriormente había trabajado con lanzadores del calibre de Rolando Arrojo, José Contreras, Orlando "El Duque" Hernández y Liván Hernández. En la década de 1990, Chinea fue entrenador de los Yomiuri Giants, en Japón.