Menciona la necesidad de presionar al presidente egipcio para que cambie el rumbo de su Gobierno
El senador estadounidense John McCain advirtió este domingo que Egipto podría convertirse en un estado islámico o enfrentar otra toma de poder por parte de los militares si se avalan las decisiones del presidente Mohamed Morsi sobre el Poder Judicial.
La agencia AFP dijo que McCain, candidato republicano a la Presidencia en 2008, instó al presidente Barack Obama a estar preparado para disponer millones de dólares de ayuda como palanca para forzar al presidente egipcio a cambiar de rumbo.
Entrevistado en la cadena Fox News sobre la posibilidad del surgimiento de un nuevo estado islámico en Egipto, McCain respondió: "yo creo que podría ir en esa dirección. También podría orientarse nuevamente a un golpe militar si las cosas van en la dirección equivocada. También se podría ver un escenario donde haya un caos continuo".
El jueves, Mursi se atribuyó prerrogativas del poder judicial, a través de un decreto que también impide que sus decisiones puedan ser apeladas judicialmente.
"Nuestros medios de presión, obviamente, no son solamente los sustanciales miles de millones de dólares en ayuda que proveemos, más el perdón de deudas, más un acuerdo con el FMI, sino también el hecho de que la opinión pública mundial (que) está en contra de este tipo de decisiones por parte de Morsi", dijo.
La agencia AFP dijo que McCain, candidato republicano a la Presidencia en 2008, instó al presidente Barack Obama a estar preparado para disponer millones de dólares de ayuda como palanca para forzar al presidente egipcio a cambiar de rumbo.
Entrevistado en la cadena Fox News sobre la posibilidad del surgimiento de un nuevo estado islámico en Egipto, McCain respondió: "yo creo que podría ir en esa dirección. También podría orientarse nuevamente a un golpe militar si las cosas van en la dirección equivocada. También se podría ver un escenario donde haya un caos continuo".
El jueves, Mursi se atribuyó prerrogativas del poder judicial, a través de un decreto que también impide que sus decisiones puedan ser apeladas judicialmente.
"Nuestros medios de presión, obviamente, no son solamente los sustanciales miles de millones de dólares en ayuda que proveemos, más el perdón de deudas, más un acuerdo con el FMI, sino también el hecho de que la opinión pública mundial (que) está en contra de este tipo de decisiones por parte de Morsi", dijo.