Los presidentes de Guatemala y Costa Rica visitaron este viernes el Parque Arqueológico de Tikal.
El presidente de Guatemala, Otto Pérez, se mostró esperanzado en que en la nueva era de 5.200 años del calendario maya, que se inició este viernes, los guatemaltecos luchen contra los altos niveles de violencia y pobreza que afectan principalmente a los pueblos originarios.
"Ojalá esta nueva era sea un nuevo amanecer, una época de cambio y armonía con la naturaleza, con nosotros mismos como guatemaltecos y nos dé la oportunidad de salir adelante", comentó Pérez tras participar en una ceremonia maya en el Parque arqueológico Tikal, 550 km al norte de la capital, donde dio la bienvenida a los primeros rayos de sol en el nuevo ciclo maya.
Guatemala es víctima de una ola de violencia que deja en promedio 16 muertos diarios, mientras que los indígenas, que representan más del 40% de los 14,3 millones de habitantes, viven la mayoría en condiciones de pobreza.
Pérez, acompañado de su par de Costa Rica, Laura Chinchilla, dijo que la nueva era llegará "con esa esperanza, ese positivismo y armonía y que como pueblo de Guatemala podamos salir adelante y hacer los cambios que tenemos que hacer".
Pérez instó a los guatemaltecos a ver el nuevo ciclo de forma positiva y sean parte de los cambios "y que nos traiga la reducción de la pobreza, la igualdad entre todos".
"Ojalá que vivamos en armonía, en paz y buscando juntos para salir adelante y poder luchar contra la pobreza, desnutrición, violencia y tantos problemas que hoy nos están aquejando, pero este nuevo amanecer nos da una nueva luz que nos permita salir adelante", puntualizó.
Este viernes, en el solsticio, los mayas, una rica cultura milenaria cuyos descendientes sufren pobreza y discriminación, cerrarán una era de 5.200 años y darán la bienvenida a un nuevo periodo.
"Ojalá esta nueva era sea un nuevo amanecer, una época de cambio y armonía con la naturaleza, con nosotros mismos como guatemaltecos y nos dé la oportunidad de salir adelante", comentó Pérez tras participar en una ceremonia maya en el Parque arqueológico Tikal, 550 km al norte de la capital, donde dio la bienvenida a los primeros rayos de sol en el nuevo ciclo maya.
Guatemala es víctima de una ola de violencia que deja en promedio 16 muertos diarios, mientras que los indígenas, que representan más del 40% de los 14,3 millones de habitantes, viven la mayoría en condiciones de pobreza.
Pérez, acompañado de su par de Costa Rica, Laura Chinchilla, dijo que la nueva era llegará "con esa esperanza, ese positivismo y armonía y que como pueblo de Guatemala podamos salir adelante y hacer los cambios que tenemos que hacer".
Pérez instó a los guatemaltecos a ver el nuevo ciclo de forma positiva y sean parte de los cambios "y que nos traiga la reducción de la pobreza, la igualdad entre todos".
"Ojalá que vivamos en armonía, en paz y buscando juntos para salir adelante y poder luchar contra la pobreza, desnutrición, violencia y tantos problemas que hoy nos están aquejando, pero este nuevo amanecer nos da una nueva luz que nos permita salir adelante", puntualizó.
Este viernes, en el solsticio, los mayas, una rica cultura milenaria cuyos descendientes sufren pobreza y discriminación, cerrarán una era de 5.200 años y darán la bienvenida a un nuevo periodo.