Expertos temen que ayuda de España a empresas privadas cubanas fortalezca el "emporio de la familia Castro"

Dos residentes de La Habana cargan un refrigerador adquirido en una tienda recuadadora de divisas. (REUTERS/Alexandre Meneghini).

Las medidas anunciadas por el gobierno español para pequeñas empresas privadas de Cuba han sido recibidas con reacciones diversas, que van desde las suspicacias, debido al predominio de personajes del régimen en este tipo de negocios, hasta el optimismo por su posible papel en la importación de alimentos e insumos.

“Habría que ver si el emporio de la familia Castro, que hoy en día también posee micro, pequeñas y medianas empresas, se va a insertar dentro del mecanismo. Todo parece indicar que sí. Esto es más una oportunidad para ellos que para los emprendedores que generan riqueza y empleo”, alertó desde La Habana el economista independiente Ángel Marcelo Rodríguez Pita.

El consejero económico y comercial de España en Cuba, Manuel Casuso, se reunió el pasado viernes en La Habana con “unos 50 empresarios privados”. Hasta el momento, no ha sido posible confirmar la identidad ni el perfil de los asistentes.

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Reportaje de Michel Suárez

La Embajada de España apoyará inicialmente a tres sectores —alimentario, tecnológico e industrias culturales—, con el objetivo de que “puedan comprar y vender en España e invertir con empresas españolas”, según la agencia de prensa EFE.

“Los asuntos de Cuba siempre hay que enfocarlos desde la perspectiva de los objetivos del gobierno cubano”, apuntó Guillermo Gortázar, presidente de la Fundación Hispano-Cubana.

Para el historiador y ex diputado, La Habana “teme” actualmente “un levantamiento popular por el desastre de la economía” y “una declaración de default o quiebra internacional, por su incapacidad para pagar las deudas”.

“Estamos ante un nuevo postureo del gobierno [cubano]. El tema de las pymes en Cuba es un engaño, están cargadas de impuestos. El gobierno de Cuba pretende engañar de nuevo, ganar tiempo y tener una coartada para obtener recursos del extranjero”, asegura Gortázar.

En cambio, Roberto Veiga González, director del laboratorio de ideas Cuba Próxima, calificó de “positivo” el anuncio de España.

“La realidad cubana sólo podrá variar, democratizarse y lograr bienestar si se internacionalizan las dinámicas de los ciudadanos. En tal sentido, esta experiencia debería extenderse al resto de Europa, América Latina, a todo el orbe, pero extenderse también a aquellas otras dinámicas de la autonomía individual que tienen que ver con la cultura, el activismo cívico y la política”, valoró Veiga.

Para el economista Elías Amor Bravo, “canalizar las ayudas solo a determinado tipo de micro pymes, en determinados sectores, es discriminante, y no es lo más adecuado”. “Creo que son palabras que se las lleva el viento y que no van a ningún sitio”, dijo.

La iniciativa, que arranca este mayo, incluye servicios de información a través de la Oficina Económica y Comercial de España y el “establecimiento de una vía rápida para la emisión de visados de negocio”, según la agencia EFE.

“El sector privado encontrará acceso a fuentes de materias primas. Sería bueno que se mantuvieran las importaciones de alimentos e insumos para su comercialización en el mercado nacional. Hoy se observa que el sector privado es líder de la oferta de productos de primera necesidad para la ciudadanía”, añadió Rodríguez Pita.

Madrid espera que sus medidas “mejoren y hagan más fuerte” a los emprendedores cubanos.

“El gobierno de España es el que más se deja engañar [por el régimen cubano], básicamente el gobierno socialista, pero también el del Partido Popular, que les ha perdonado miles de millones de euros y sigue tragándose las tonterías”, lamentó Gortázar.