Crisis en Venezuela, incertidumbre en Cuba

El transporte de pasajeros, sobre todo privado, es el que más pronto padece la crisis venezolana.

Los venezolanos debieron hacer colas esta semana para poner combustible en sus autos, en medio de la caída del precio del petróleo, fallas de en la refinación o otros factores. Esta crisis alerta a los cubanos, que deberán apretarse otra vez los cinturones.

La crisis en Venezuela que se expresó esta semana en largas filas de choferes para poner combustible a sus autos apunta directamente a Cuba, dependiente como es del suministro de crudo que ha recibido a cambio de sus servicios médicos y otros negocios durante años.

Un litro de petróleo en el mercado negro costó en el pasado siete pesos en moneda nacional, hoy los boteros pagan 15 pesos cubanos por el mismo litro. Y este, es solo un ejemplo.

“Todos estamos sufriendo los problemas del transporte que van aumentando en la medida en que la crisis en Venezuela se agudiza”, dijo la economista independiente Karina Gálvez.

“Si el gobierno cubano dejara que la gente trabajara en Cuba con más libertad y con más autonomía esta situación la pudiéramos estar enfrentando de otra manera, pero está pasando lo mismo que cuando se cayó el campo socialista”, agregó Gálvez.

La crítica situación se debe al desabastecimiento por factores como la caída en la producción de crudo, el descenso en el precio del barril por dos semanas consecutivas (tan sólo esta semana retrocedió 59 centavos), la disminución de las importaciones de productos y fallas en la refinación, indicaron fuentes en Venezuela.

Un reciente reporte publicado por Cubanet indicó que el segundo semestre del 2017 podría ser grave para Cuba, debido no solo a la crisis venezolana sino también a la sequía y al comportamiento de los proyectos de inversión extranjera, que se alejan de lo previsto en los planes del gobierno cubano.

“Se espera que después de junio se ponga bien difícil. No se sabe qué va a pasar ni cómo se va a salir del atolladero. Las cosas no han estado saliendo como se previó y no me refiero solo a la crisis en Venezuela que sí se veía venir sino al problema de la sequía, al comportamiento de las inversiones extranjeras. El boom del turismo que ha sido un verdadero chasco, el descubrir que no estamos aptos para asumir una avalancha de visitantes ni para elevar los estándares de nuestra oferta, en todos los sentidos, y por supuesto, Trump, que ha puesto nervioso a más de uno por allá arriba”, dijo a CubaNet, un alto funcionario del Ministerio de Economía y Planificación de Cuba, que habló en condición de anonimato.

Según el reporte, organismos estatales analizan temas productivos y hasta el eventual cierre parcial o temporal de fábricas productoras de cemento y otros materiales de la construcción.

Como siempre, los cubanos temen a los apagones, la falta de transporte, de alimentos y la imposibilidad de salir adelante.

"Debo decir que en Pinar del Río hay actualmente algunos apagones por distintas causas (...) no lo puedo asegurar pero yo creo que también está relacionado con la falta de petróleo y la crisis en Venezuela", expresó Gálvez.