El letrado dijo a ABC que “conforme a las leyes procesales cubanas” y con un “enfoque meramente cubano, podría decirse” que el juicio a Carromero fue justo y con garantías
El Movimiento Cristiano Liberación (MCL) sale al paso a declaraciones del abogado español que se ocupó de coordinar la defensa de Ángel Carromero, realizada por letrados cubanos.
José María Viñals Comallonga dijo al diario español ABC que “conforme a las leyes procesales cubanas” y con un “enfoque meramente cubano, podría decirse” que el juicio a Carromero fue justo y con garantías.
El MCL señala en su página de internet que no entiende “que puedan existir dos tipos de justicia, una imparcial y justa, y otra parcializada e injusta”, porque el abogado Viñals afirma en la entrevista que desde el punto de vista “jurídico español o de una jurisdicción de la Unión Europea, podemos decir que no se habría cumplido con el principio de contradicción”.
Contradicción la de Viñals, dice el Movimiento Cristiano Liberación, porque mientras el letrado reconoce que en el juicio “no pudimos acceder a pruebas relevantes” (automóvil accidentado, huellas del derrape, señales de tráfico y otras) “ni presentar informes periciales propios”, y tuvieron que atenerse a lo dicho por “las autoridades policiales y forenses locales”, expresa, no obstante, que los investigadores cubanos “siguieron escrupulosamente los plazos previstos en sus normas” y agrega que “los letrados cubanos, y yo mismo cuando estuve en Cuba, pudimos trabajar de forma independiente”.
Además, el MCL no entiende tampoco cómo “aún no se habla de las evidencias que tanto en Suecia como en España se conocen a partir de SMS enviados por Aron y Ángel” (se refiere a Aron Modig, el sueco que acompañó a Ángel Carromero en su viaje a Cuba y que iba en el vehículo) desde sus móviles a esos amigos en estos países refiriéndose a que habían sido perseguidos y golpeados hasta ocasionarles una colisión fatal”.
Por su parte, la viuda de Oswaldo Payá, Ofelia Acevedo, afirmó el sábado a la agencia Efe, que su familia se alegra de que Carromero ya esté en España, pero espera que las leyes españolas sean más flexibles y que Carromero sea liberado.
Acevedo reiteró que fueron infructuosas sus gestiones para reunirse con el joven político español antes de regresar a su país, y añadió que aún anhela entrevistarse personalmente con él.
José María Viñals Comallonga dijo al diario español ABC que “conforme a las leyes procesales cubanas” y con un “enfoque meramente cubano, podría decirse” que el juicio a Carromero fue justo y con garantías.
El MCL señala en su página de internet que no entiende “que puedan existir dos tipos de justicia, una imparcial y justa, y otra parcializada e injusta”, porque el abogado Viñals afirma en la entrevista que desde el punto de vista “jurídico español o de una jurisdicción de la Unión Europea, podemos decir que no se habría cumplido con el principio de contradicción”.
Contradicción la de Viñals, dice el Movimiento Cristiano Liberación, porque mientras el letrado reconoce que en el juicio “no pudimos acceder a pruebas relevantes” (automóvil accidentado, huellas del derrape, señales de tráfico y otras) “ni presentar informes periciales propios”, y tuvieron que atenerse a lo dicho por “las autoridades policiales y forenses locales”, expresa, no obstante, que los investigadores cubanos “siguieron escrupulosamente los plazos previstos en sus normas” y agrega que “los letrados cubanos, y yo mismo cuando estuve en Cuba, pudimos trabajar de forma independiente”.
Además, el MCL no entiende tampoco cómo “aún no se habla de las evidencias que tanto en Suecia como en España se conocen a partir de SMS enviados por Aron y Ángel” (se refiere a Aron Modig, el sueco que acompañó a Ángel Carromero en su viaje a Cuba y que iba en el vehículo) desde sus móviles a esos amigos en estos países refiriéndose a que habían sido perseguidos y golpeados hasta ocasionarles una colisión fatal”.
Por su parte, la viuda de Oswaldo Payá, Ofelia Acevedo, afirmó el sábado a la agencia Efe, que su familia se alegra de que Carromero ya esté en España, pero espera que las leyes españolas sean más flexibles y que Carromero sea liberado.
Acevedo reiteró que fueron infructuosas sus gestiones para reunirse con el joven político español antes de regresar a su país, y añadió que aún anhela entrevistarse personalmente con él.