¿Creen que en la actualidad se ha vulgarizado el estilo de vestir de los cubanos?

¿Creen que en la actualidad se ha vulgarizado el estilo de vestir de los cubanos?

Hay una tendencia mundial a bajar los cánones de la vestimenta formal de las personas, por lo que la ropa deportiva se adueña cada vez de más espacios a nivel mundial y el estilo sobrio o de etiqueta ve reducido sus espacios de reinado absoluto.

Cuba no se encuentra ajena a esta tendencia mundial de sustituir el protocolo y la formalidad por la vestimenta casual o deportiva.

Pero también existe una evidente depauperación de las normas de educación elemental y de los principios de decencia y buenas formas que siempre caracterizaron al pueblo cubano.

La violenta crisis económica vivida por el país en los principios de los 90 hizo que la lucha por cubrir las necesidades elementales de las personas los llevara a descuidar aspectos como la conducta social y la educación civil de la familia cubana.

La política oficial cubana también ha influenciado en este decaer de las normas de educación social. En su empeño por generalizar las nuevas normas sociales de su régimen político se perdió la esencia de la educación familiar para ser sustituida por la conducta uniforme y colectiva de los nuevos planes de educación.

Esto llevó a que más de una generación de jóvenes se desarrollara sin la presencia de sus padres, lejos de sus buenas formas y sus principios cívicos. Crecieron en centros de educación internos, todos uniformados y conviviendo más con sus compañeros de aula que con sus respectivos padres y hermanos.

Son cubanos que llegaron a la mayoría de edad en un ambiente en que no existe la caballerosidad, la cortesía, el respeto a los mayores y que renunciaron a muchas otras conductas que siempre se transmitieron de grandes a chicos, en el seno familiar.

Las personas sin camisa en la calle, descalzados en todo momento, usando gorras o sombreros en las mesas del comedor o pasado por al lado de una persona accidentada sin ofrecer ayuda, eran conductas intolerables en otra época, hoy son pasajes habituales en la vida de los cubanos.

Actualmente la educación formal o cívica del cubano ha decaído hasta un grado muy bajo, una mezcla de desatención y pobreza ha desarrollado en el cubano un sentimiento de supervivencia que no le permite preocuparse por formalidades o comportamientos sociales.

La forma de vestir no escapa de esta degradación social que lamentablemente sufrimos en Cuba.

Por otra parte es tal el grado de pobreza generalizada que la categoría de elegancia ha sido sustituida por la de ropa nuevas, si tienes prendas nuevas eres elegante, no importa si son informales, ridículas o fuera de contexto, con ser nuevas es suficiente para declararlas elegantes.

Pero queda claro que en la mayoría de los casos no lo son.

El gobierno ha negado la existencia de este problema por mucho tiempo, presumiendo de un alto nivel y capacidad en la población como resultado de sus políticas educacionales y sociales.

Esperaron mucho, justo hasta ahora, para reconocer los enormes problemas de educación e irrespeto social que afectan a la sociedad cubana, una situación que ahora es denunciada inclusive por el propio Raúl Castro.